La espiral de violencia contra líderes sociales y defensores de derechos humanos, así como firmantes del Acuerdo de Paz a nombre de las Farc que se presentó en 2020, continuó con furor en lo que va del nuevo año, pues entre el viernes y sábado pasado fueron asesinadas cuatro personas en los departamentos de Antioquia, Casanare y Meta.
Según las cifras de la ONG Instituto de Estudios para el Desarrollo y la Paz (Indepaz), el año pasado fueron asesinados en todo el país 310 líderes sociales y defensores de derechos humanos; así como 64 firmantes del Acuerdo de Paz que hicieron parte de la hoy desmovilizada guerrilla de las Farc.
En los dos primeros días del 2021 fueron asesinados dos líderes sociales que como educadores hacían parte de la Federación Colombiana de Educadores (Fecode), así como dos firmantes de la paz que adelantaban desde 2016 el proceso de reincorporación a la sociedad.
La primera víctima este año de la violencia contra líderes sociales, que el Gobierno nacional atribuye a los grupos armados ilegales que operan en diferentes territorios, fue Gerardo León, de 68 años, a horas del mediodía del pasado primero de enero en el resguardo indígena ‘El Tigre’ de la comunidad Sikuani ubicada en la vereda San Antonio, zona rural de Puerto Gaitán, Meta.
El coronel Gustavo Berdugo, comandante del Departamento de Policía Meta, indicó que por el momento se descarta que "el homicidio de esta persona se haya presentado por el hecho de ser un líder social. Estamos investigando, porque al parecer se trató de una riña, de un hecho de intolerancia entre integrantes de la misma comunidad".
También el pasado primero de enero fue encontrado sin vida en área rural de Yopal, Casanare, el cuerpo del docente Diego Betancourt Higuera, quien prestaba sus servicios en la escuela de la vereda Palomas.
El docente había desaparecido el pasado 31 de diciembre, por lo que conocidos suyos decidieron ir a buscarlo a la escuela, en donde encontraron su cuerpo con varias heridas de arma blanca.
En tanto que en horas de la madrugada del primero de enero en el municipio de Briceño, Antioquia, fue asesinada la excombatiente de las Farc, Yolanda Zabala Mazo, de 25 años. En estos hechos también le quitaron la vida a su hermana, la menor de edad Reina Zabala Mazo, de 17 años.
Según las informaciones preliminares que han conocido las autoridades, varios sujetos llegaron hasta la vivienda de las hermanas en la vereda Travesías del municipio de Briceño y les dispararon.
Yolanda Zabala realizaba su proceso de reincorporación en el ETCR La Plancha de Anorí, pero por las festividades de fin de año regresó a su tierra natal.
Tras un consejo de seguridad que se llevó a cabo en Briceño el Ejército ofreció $50 millones por información que permita llegar a los autores del doble crimen.
Finalmente, el pasado sábado fue asesinado en Cartagena del Chairá (Caquetá) el desmovilizado de las Farc, Duván Arled Galíndez, quien recibió tres impactos de arma de fuego de un sujeto que ejecutó el ataque cuando la víctima salía de un establecimiento público en compañía de su compañera sentimental.
La Policía señaló que en esta región opera la estructura 62 de las disidencias de las Farc.
El Partido Farc reaccionó ayer a estos hechos señalando “tres días de 2021 y contamos el segundo compañero asesinado, 251 en total. Anoche en Cartagena del Chairá, Caquetá, fue asesinado Duván Arled Galíndez Nadia, quien se encontraba en un restaurante junto a su compañera sentimental”.
En tanto que Fecode dijo “denunciamos y condenamos el asesinato del docente Diego Betancourt Higuera, cuyo cadáver fue encontrado al interior de la IE El Triunfo, en Yopal. Resulta inaceptable comenzar el año en una situación de violencia contra los docentes del país”.
Por su parte Indepaz señaló en Twitter “con Diego van 2 líderes y defensores de DDHH asesinados en el 2021. Los dos maestros miembros del sindicato Fecode”.
Preocupación
Al finalizar el año pasado la alta Comisionada de ONU para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet, instó al Gobierno colombiano a aumentar la protección de la población debido al aumento de la violencia en zonas rurales. Entre las cifras que citó señaló que su oficina en el país documentó en 2020, 66 masacres, en las que 255 personas fueron asesinadas en 18 departamentos.
Además la oficina de ONU en Colombia para los Derechos Humanos recibió información sobre el asesinato de 120 defensores de derechos humanos en 2020 y documentó 244 asesinatos desde 2016 de excombatientes de las Farc que se acogieron al Acuerdo de Paz.