El ministro de Seguridad de Panamá, José Raúl Mulino, puso en duda las posibilidades de éxito del diálogo previsto entre el gobierno colombiano y las FARC, aunque afirmó que los panameños desean que las negociaciones lleguen a buen puerto.
"Me atrevo a interpretar el sentimiento de todo el pueblo panameño de desearle a Colombia y a su presidente (Juan Manuel) Santos todo el éxito que puedan tener en esta aventura que no deja de serlo", dijo Mulino a periodistas.
Sin embargo, las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) no son "un cuerpo de monjes, estamos hablando con gente que ha matado, ha traficado droga y asesinado inocentes", manifestó el ministro ante un foro sobre seguridad y narcotráfico en que participaron autoridades policiales de Centroamérica.
En la actividad estuvo presente también el general retirado de Colombia Rosso José Serrano.
Mulino aseguró que el narcotráfico y el terrorismo son "sombra y cuerpo" de las FARC y añadió que si sus dirigentes "no están dispuestos a abandonar las dos actividades, mejor apaguemos la luz".
Colombia y Panamá comparten una frontera de unos 300 kilómetros, en una zona selvática por donde las Farc han incursionado en territorio panameño en varias ocasiones.
Por su parte, el director del Servicio Nacional de Fronteras, Frank Abrego, comentó que "desmovilizar 7.000 u 8.000 hombres es una palabra muy grande. Al final, ¿de qué van a vivir?".
Abrego teme que si se llega a algún acuerdo de paz, los desmovilizados terminen por seguir en el tráfico de drogas.
"Las FARC terminarán en dos o tres carteles más", dijo Ábrego, quien aseguró que las autoridades panameñas seguirán patrullando la frontera para evitar la entrada de droga.
El general Rosso dijo a la AFP que ésta "es la última oportunidad que tienen las FARC para poner término al prolongado conflicto.
"Esa vinculación con el narcotráfico la tiene muy desgastada internacionalmente y ojalá lo aprovechen y llegue la paz", apuntó el militar retirado colombiano.
El proceso de diálogo anunciado por el presidente colombiano Juan Manuel Santos contará con el apoyo de Cuba, Noruega, Venezuela y Chile.