La politóloga y dirigente cívica María Paulina Espinosa ha estado de manera permanente trabajando en campañas sociales, de cultura y siempre inmersa en búsqueda de metas de progreso del país. Ha cumplido exitosas misiones en distintas partes del mundo en representación del Gobierno nacional, y en altos cargos en el sector público, en los que siempre deja su huella como una persona dinámica, de realizaciones. Ahora, sus actividades están concentradas en Cartagena, donde reside desde hace dos años. Siempre la atrajo la Heroica. Se destaca su libro Soledad Román, a la sombra del presidente Núñez, una obra excelente que recrea la vida de la esposa del Pensador de El Cabrero, quien fue su compañera leal hasta el final de este extraordinario estadista cartagenero.
Está feliz en la ciudad que llama su “paraíso en la Tierra”. Se ha integrado de lleno a todo lo que tiene que ver con la urbe más bella y turística del país. Los cartageneros le han tomado mucho afecto a María Paulina, que ya se siente ‘costeña’. La han declarado ciudadana honoraria de Cartagena. Lo que ella hace está acorde con su temperamento de mujer hiperactiva desde su niñez, de energía desbordante que contagia de entusiasmo su entorno. En la finca de su padre le gustaba desde madrugada realizar labores de campo. Su progenitor le decía que ‘era como una bala, pum pum’. Desde entonces es como con cariño se le conoce.
Otra de sus pasiones es la literatura, autora de varias obras. Hace pocos años fue aceptada como miembro de la Academia de Historia por su trabajo sobre Soledad Román.