El presidente venezolano Nicolás Maduro pidió nuevamente a dirigentes opositores sentarse a una mesa de diálogo con su gobierno, en el marco de la Asamblea Constituyente que se elegirá en julio y que sus adversarios rechazan.
"Ratifico mi llamado al diálogo. Y le pongo nombre y apellido: Manuel Rosales, Henry Ramos Allup, Henri Falcón y Julio Borges. Hasta ahí llego. A todos ustedes, dejo constancia histórica de que los vuelvo a llamar al diálogo", expresó el mandatario durante un acto con mujeres en el centro de Caracas.
"Ratifico, en el marco de la Asamblea Nacional Constituyente, a sentarme a conversar", agregó.
El mandatario afirmó que le gustaría que en la Constituyente participen los principales líderes opositores.
"Ellos tienen miedo, porque saben que pelo a pelo, hoy por hoy, después de todos los errores (...) la revolución les gana cualquier elección", aseguró.
Según encuestas, siete de cada diez venezolanos rechazan la gestión del presidente.
La oposición ha adelantado que no participará en la Constituyente por considerar que su sistema de elección es "fraudulento", ya que una tercera parte de sus asambleístas será elegida por sectores sociales en los que el gobierno es influyente.
Además de la Constituyente para julio, el poder electoral -al que la oposición acusa de servir al gobierno- convocó las elecciones de gobernadores para el 10 de diciembre de este año. Debieron realizarse en diciembre último.
"¿Tampoco se van a postular para las elecciones de gobernadores? Lo único que les puedo decir, muchas gracias (...) ¿Tampoco a las de alcaldes el próximo año?", increpó el mandatario.
Las elecciones de alcaldes corresponden, según la ley, para finales de este año, pero el poder electoral no las ha mencionado.
La oposición dio por concluido un diálogo con el gobierno en diciembre último por considerar que incumplió lo pactado.
Desde el 1 de abril, inició una oleada de protestas opositoras en todo el país exigiendo elecciones generales para la salida de Maduro. Las manifestaciones ya dejan 57 muertos, un millar de heridos y más de 2.800 detenidos, según la ONG Foro Penal.