La Juanfe, un hogar en donde adolescentes crecen junto a sus hijos

Martes, 25 de Octubre de 2016
Esta fundación está en Cartagena desde hace más de 15 años. Nació del dolor de una joven madre por la muerte de su hijo.

Margarita*, una joven afrocolombiana que vive en uno de los barrios con mayor índice de marginalidad de Cartagena de Indias en Colombia, todos los días junto a sus útiles de estudio e implementos que utiliza a diario en sus prácticas de Cocina y Gastronomía, lleva como su más preciado tesoro a su hijo, un bebé de apenas 14 meses que y que junto a ella comparte todo el día: Él en la guardería y ella en los modernos salones de clase en donde recibe clases de los más prestigiosos chef y empresarios gastronómicos de la ciudad.

 

Todo esto sucede en la Fundación Juan Felipe Gómez Escobar o más conocida como “La Juanfe”, una fundación a la que BBVA se ha vinculado desde hace varios años a través de aportes económicos que han permitido el sostenimiento de 300 jóvenes madres y que nace gracias a la iniciativa de Catalina Escobar, tras la muerte de su hijo Felipe en 2001 en un accidente doméstico y concentra sus esfuerzos en reducir la mortalidad infantil de niños entre 0 y 2 años de edad, y empoderar madres adolescentes gestantes y lactantes en condiciones de pobreza extrema y vulnerabilidad.

 

Hablamos con su fundadora acerca de sus proyectos, del papel que juega BBVA en su futuro y sobre todo de cómo esta fundación está cambiando la vida de cientos de mujeres que apenas en su adolescencia ya tienen que cargar con la responsabilidad de criar uno o varios hijos.

 

“La Juanfe nace a partir de la muerte de Juan Felipe Gómez Escobar, mi hijo en 2001 y ante la precaria situación que se vivía en el Hospital de Maternidad Rafael Calvo donde hacía de voluntaria, en Cartagena, tomo la decisión de crear La Juanfe como ayuda a la prevención de muertes de bebés lactantes”, dice Catalina Escobar.

 

“La Fundación concentra sus esfuerzos principalmente en la ciudad de Cartagena, y le apunta a dos objetivos estratégicos: reducir la mortalidad infantil de niños entre 0 y 2 años de edad, y empoderar madres adolescentes gestantes y lactantes, ambas poblaciones en condiciones de pobreza extrema y vulnerabilidad”, afirma esta mujer que con su esfuerzo ha abierto un camino de esperanza para las madres jóvenes de Cartagena.

 

Actualmente La Juanfe le está apostando a replicar su modelo de intervención en Panamá, México y Chile. En Colombia se están adelantando esfuerzos para llegar a Medellín y Quibdó.

 

Los programas

 

Las madres adolescentes cuentan con el Modelo 360 distribuido en tres fases: Madres Adolescentes Primigestantes, Madres Adolescentes en Seguimiento y Oficina de Empleo y Emprendimiento.

 

La primera fase tiene una duración de seis meses donde se reciben 150 madres adolescentes por semestre. Las madres pueden estar en estado de gestación o su hijo debe tener menos de 12 meses. En la segunda fase se da más relevancia a la formación y capacitación de las madres con miras a brindarles todas las herramientas para su inserción al mercado laboral y la generación de ingresos. Durante esta fase, las madres siguen teniendo acceso al apoyo psicosocial y atención médica.

 

En la última fase, las jóvenes finalizan su formación y se les apoya en la consecución de un empleo estable que les genere recursos para mejorar su calidad de vida y la de sus familias.

 

Catalina es muy enfática cuando afirma: “BBVA para nosotros ha significado el soporte directo a 300 jóvenes beneficiarias del programa de Madres Adolescentes Primigestantes, estas madres han logrado entrar a la pirámide del desarrollo con el fin de garantizar sus derechos sexuales, reproductivos, educativos, sanitarios, sociales, económicos y de salud”.

 

Y reitera: “Las 300 madres beneficiadas hacen parte del Programa de Madres Adolescentes Primigestantes, el cual corresponde a la primera fase del Modelo 360. Esta fase cuenta con una intervención integral desde tres enfoques: psicosocial, formativo y de salud”.