Doble Anís ni pa’remedio. Las festividades de San Pedro en el Huila están en riesgo de quedarse sin su más reconocido sabor: el aguardiente Doble Anís.

Desde hace dos semanas en Neiva y el resto del Huila no se consigue una “media” del anisado ni para remedio.

¿Y eso qué pasó? Pues que desde hace 5 años, cuando se venció la concesión otorgada para remplazar lo que era la producción y comercialización del aguardiente, ninguno de los 5 gobernadores que pasaron por principal silla opita se atrevió a abrir y otorgar la nueva concesión.

Los dipsómanos huilenses esperan sedientos una pronta solución para su dura sequía etílica. 

La cronología. He aquí la cronología de los hechos que motivan la actual vigilia alcohólica en territorio opita:

En 1997 la Asamblea del Huila liquidó la Industria Licorera del Huila que por más de 50 años destiló el aguardiente Doble Anís. Una pesada carga laboral, las excesivas prestaciones sindicales y el manejo politiquero la habían hecho inviable.

Se entregó en concesión por diez años la producción y comercialización a la firma “Licorsa S.A”, la licitación fue hecha por el entonces gobernador Jaime Losada Perdomo (asesinado por las Farc).

Un buen negocio. Durante ese lapso el Departamento del Huila recibió $ 110 mil millones por concepto de las utilidades del contrato y los impuestos; de haber continuado la Licorera oficial, habría recibido menos de $ 50 mil millones (según estudios hechos por la Gobernación del Huila).

Tal contrato se venció en 2007. El entonces gobernador Rodrigo Villalba, de salida, prefirió dejar la nueva adjudicación en manos del entrante Luis Jorge Pajarito Sánchez, quien dilató el asunto y se fue sin hacer la necesaria licitación.

Llegó luego, en 2012, Cielo González Villa; pasó un año, fue destituida y tampoco adelantó el proceso licorero. Los gobernadores encargados Luis Guillermo Vélez y Julio César Triana tampoco. Triana le pidió facultades a la Asamblea para un contrato parcial y los diputados lo archivaron, sin debatirlo.

Con sabor paisa. Entre 2007 y 2013, el Doble Anís se ha producido mediante sucesivos contratos parciales en la Fábrica de Licores de Antioquia. Hace dos semanas se agotó la existencia del aguardiente en todos los establecimientos.

De acuerdo con los registros históricos de los recientes años, el Departamento dejará de recibir aproximadamente $ 7.500 millones por concepto de impuestos si no se contrata de urgencia la nueva producción. Sobre todo porque entre mayo y junio, época de fiestas sampedrinas, se presenta el mayor consumo. Esto es como la Feria de Manizales sin toros, ni pasodoble; la de Cali sin salsa; Pasto sin la guaneña y Riosucio sin chicha.

A las carreras. Solo en las últimas horas la Asamblea le aprobó al nuevo gobernador Carlos Mauricio Iriarte las facultades para contratar de emergencia la producción de 1,5 millones de botellas (3 millones de “medias”), y en un lapso de seis meses abrir la licitación de largo plazo. Si se afanan, habrá Doble Anís en San Pedro... Si no, a tomar “chirrinchi”.