El izquierdista Partido de la Revolución Democrática (PRD) de México presentó el lunes su iniciativa de reforma energética que propone mayor autonomía para la estatal Pemex sin cambiar la Constitución, y llamó a que la ciudadanía se pronuncie en una consulta.
Cuauthémoc Cárdenas, uno de los fundadores del PRD, calificó de "amenaza" la iniciativa gubernamental y la tildó de "entreguista y neoliberal", ante un millar de militantes congregados en el emblemático monumento a la Revolución de la capital.
En ese lugar descansan los restos de su padre, el fallecido presidente Lázaro Cárdenas, profundamente admirado en México por la nacionalización del petróleo que decretó en 1938.
Tras hacer una ofrenda floral en la cripta de su padre, Cuauthémoc Cárdenas -candidato presidencial por el PRD en 1988, 1994 y 2000- sostuvo que las reformas constitucionales que propone el Ejecutivo en su iniciativa de reforma, buscan "desplazar al Estado mexicano del control y manejo de su riqueza petrolera".
La semana pasada, el presidente Enrique Peña Nieto, del Partido Revolucionario Institucional (PRI), presentó su proyecto de reforma que prevé modificaciones de los artículos 27 y 28 de la Constitución para que Pemex pueda asociarse con privados en un esquema de "contratos de utilidad compartida" para exploración y extracción de crudo, aunque aseguró que conservará la empresa y los hidrocarburos en manos del Estado.
"Ingeniero Cárdenas, ¡no permita que gente traidora pisotee la suprema obra de su padre!", le gritaban sus seguidores en el acto del PRD, cuya propuesta sólo incluye la modificación de 12 leyes secundarias o reglamentarias sin modificaciones a la Constitución.
Cárdenas esgrimió que la iniciativa del PRD apuesta a conceder autonomía presupuestaria y de gestión a Pemex y a la también estatal Comisión Federal de Electricidad (CFE), reduciendo su carga fiscal.
Una consulta sobre Pemex
Aunque difieren en los mecanismos, todos los partidos mexicanos coinciden en su voluntad reformar Pemex, que aporta más de un tercio de todos los ingresos públicos pero que en los últimos años ha registrado una baja en su producción.
El PRI y el opositor PAN (Partido Acción Nacional, conservador) suman los votos necesarios para sacar adelante una iniciativa a partir de septiembre en el Congreso sin el PRD, por lo que Cárdenas pidió este lunes a sus partidarios que recojan firmas para convocar a una consulta ciudadana vinculante sobre el contenido de la reforma.
Desde la izquierda extraparlamentaria, Andrés Manuel López Obrador -dos veces candidato presidencial por el PRD pero hoy alejado del partido- ha llamado a los mexicanos a una gran manifestación contra la reforma el 8 de septiembre en la capital.
El secretario (ministro) de Energía, Pedro Joaquín Coldwell, aseguró este lunes a la emisora Radio Fórmula que la iniciativa del PRD tiene coincidencias con la del gobierno y que están dispuestos a dialogar con todos los sectores políticos, pero reiteró que los cambios constitucionales son "fundamentales".
"Ya vivimos la experiencia de 2008, donde se partió de la premisa de no tocar la Constitución en la reforma energética que entonces se implementó, y los resultados no cambiaron. Sigue cayendo la producción de crudo, la de gas", dijo.
La producción de Pemex cayó de 3,4 millones de barriles diarios de crudo en 2004 a 2,5 millones el año pasado.
La propuesta del PAN también contempla modificar la Carta Magna para lograr una apertura de 100% a la inversión privada nacional y extranjera en el sector.
"Se busca que en la práctica pasemos de un monopolio de la energía, que impide a ciudadanos tener opciones para escoger precio y calidad, a otro abierto y de libre competencia para que Pemex y la eléctrica CFE (Comisión Federal de Electricidad) sean jugadores más en igualdad de circunstancias", dijo a la AFP a fines de julio el senador panista Francisco Búrquez.
Una lucha de símbolos
Para defender su iniciativa, Peña Nieto esgrimió la figura de Lázaro Cárdenas (en el poder entre 1934 y 1940) y aseguró que su propuesta retoma "palabra por palabra" el texto del artículo 27 constitucional que impulsó.
Los mandatarios que sucedieron a Cárdenas fueron limitando paulatinamente el acceso del sector privado a Pemex, hasta que en el mandato de Adolfo López Mateos (1958-1964) se estipuló en la Constitución la prohibición definitiva.
Entre aplausos de los congregados, Cuauthémoc Cárdenas sostuvo que la de Peña Nieto es una "iniciativa privatizadora, diga lo que se diga".