El alcalde de Nueva York, Bill de Blasio, comunicó que todas aquellas personas que se nieguen a utilizar mascarilla en las zonas de la ciudad con mayor incidencia de la pandemia serán multadas, en medio de un aumento significativo en el número de casos en distritos como Brooklyn y Queens.
De Blasio habló la situación de la pandemia e informó que "cientos" de empleados recorrerán algunas de las zonas más recientemente afectadas por la pandemia para informar y ofrecer mascarillas.
El alcalde también informó que las autoridades sanitarias de la ciudad ordenarán el cierre de las escuelas privadas y los centros de enseñanza infantil si no siguen las normas decretadas por el Departamento de Salud.
La ciudad de Nueva York, dijo De Blasio, no descarta volver a tomar medidas más agresivas para frenar el avance de la pandemia si la situación "continúa deteriorándose", prohibiendo las reuniones que no sean muy pequeñas o cerrando los negocios considerados no esenciales.
"Nadie quiere que eso suceda, dijo el alcalde, que avisa que "si tiene que suceder", el asunto se tratará "lo más cuidadosamente posible" pero, al tratarse de "una situación muy seria", es necesario "tener todas las opciones sobre la mesa".
Las autoridades de la ciudad informaron que el índice de casos positivos había subido por encima del 3%, después de haber registrado cifras en torno al 1% durante todo el verano.
Durante la primavera la Policía de Nueva York estaba autorizada a sancionar e incluso arrestar a aquellas personas que no utilizaban mascarilla, o no cumplían con las reglas de distanciamiento social, pero la medida fue retirada poco después tras comprobar una "desproporcionada" detención de ciudadanos afroamericanos.
El estado de Nueva York cuenta con unos 462.000 casos, de los cuales aproximadamente 248.000 corresponden a la ciudad. A nivel estatal son 32.743 los fallecidos, de los que 23.814 corresponden al área metropolitana neoyorquina.