Si se cumplen los resultados de la encuesta del Banco de la República sobre la inflación en abril de este año, la cifra sería de 0,20 por ciento, pero otras consultas indican que sería de 0,16%. Este indicador será dado a conocer hoy por el DANE, pero de antemano se prevé que la tasa no debiera estar por encima de ese tope debido a la poca presión del rubro de alimentos y transporte.
Entre los consultados por el Emisor, la tasa mínima de inflación fue de 0,08 por ciento y la máxima de 0,35 por ciento. Respecto a la inflación sin alimentos, la encuesta del Banco arrojó que sería de 0,17 por ciento de promedio con un mínimo de 0,07 y un máximo de 0,46 por ciento.
En la última encuesta de opinión empresarial de Fedesarrollo, frente a la pregunta “con respecto a su nivel actual, usted considera que durante los próximos seis meses la inflación aumentará, disminuirá o se mantendrá igual”, 75,6% considera que aumentará, 22% estima que permanecerá igual, y apenas 2,4% indica que se reducirá. De esta forma, el balance, continuó en terreno positivo y se ubicó en 73,2% en el mes de abril.
Por otra parte, indican algunos analistas, “para 2013 prevemos que la inflación se mantendrá por debajo del punto medio del rango meta del Emisor, cerrando el año en 2,6%. La senda esperada de los precios muestra un repunte en el último trimestre del año que, además del comportamiento de algunos bienes puntuales, puede explicarse por la recuperación esperada de la actividad económica y un efecto base dada la baja inflación observada al cierre de 2012”.
Señalan que en el rubro de alimentos, la ausencia de riesgos climáticos permite anticipar una baja volatilidad en los precios. Sin embargo, la inflación de esta categoría puede tener en la segunda parte del año una ligera presión alcista, generada por menores incentivos a la oferta.
“En los bienes transables, se prevé una relativa estabilidad, favorecida por una tasa de cambio que estimamos se ubique en un rango cercano a sus niveles actuales. Por su parte, la inflación de los bienes no transables estará condicionada por el hecho de que la brecha de producto negativa se cerrará en el segundo semestre”, aseguran los investigadores.
Indican que los bienes regulados tenderán a mantenerse estables, dado que las revisiones salariales han sido moderadas este año, y que los precios de las materias primas a nivel global han presentado una ligera tendencia a la baja a lo largo del año.
En marzo, la inflación anual (1,91%) se aceleró levemente y las medidas de inflación básica no presentaron cambios importantes. Tanto el promedio de dichas medidas, como la mayor parte de los indicadores de expectativas de inflación se encuentran por debajo de la meta (3%).
Por otra parte, según la encuesta de expectativas de inflación de la Bolsa de Valores de Colombia, el promedio de los encuestados espera que el IPC se ubique en 0,19%.
De las firmas consultadas, la que tiene la menor expectativa es Helm Bank, que estima un 0,08%. Su analista Marisol Torres asegura que en abril no hubo un aumento de precios significativo, debido a que la inflación de alimentos estará muy baja o incluso negativa.
“Nos basamos en los informes del Sipsa, que nos muestran que los precios de los tubérculos, legumbres y frutas fueron negativos durante la mayor parte del mes. Eso nos da un argumento para pensar que efectivamente la inflación de alimentos será baja y la inflación total también”.
Por el contrario, el analista de Alianza Valores Juan David Ballén, dice que su firma estima una inflación de 0,35% (la más alta dentro de todos los consultados). Para Ballén, la vivienda, que pesa cerca de 30% en el dato de inflación, subió en el mes y presionaría el resto de grupos.
De otra parte, considera que la inflación total ya habría tocado fondo en febrero, cuando se ubicó en 1,83% (inflación doce meses), por lo que espera un rebote en los precios. “Los datos pasados son históricamente bajos, entonces es muy fácil que los precios este año se sitúen por encima de eso.