Desplazada por la violencia del municipio de Tacaloa, en el departamento de Bolívar, Gregoria Flórez es madre cabeza de familia y un ejemplo de lo que puede hacer una persona en su afán de superación. Como trabajadora doméstica, aprendió de una dueña de casa el arte de la bisutería y los accesorios para dama.
Fue así que se enteró en una Alcaldía Local de Bogotá que el Instituto para la Economía Social –IPES- estaba realizando un proceso de fortalecimiento empresarial para pequeños/as comerciantes. Sin pensarlo dos veces se inscribió y aprendió a constituir una empresa, contabilidad básica, imagen corporativa, presentación del producto y atención al cliente.
En tan solo 2 meses de capacitación logró lo que muchos de sus compañeros se demoran años en alcanzar: exhibir sus productos en la Feria de las Colonias, una de las vitrinas comerciales más importantes del país, donde el IPES, entidad adscrita a la Secretaría de Desarrollo Económico, participa con el pabellón de Bogotá.
“Aprendí que debo mirar a los ojos cuando estoy al frente de un cliente, hablar con seguridad y convicción y mantener un ahorro para mi empresa”, señala Gregoria, ahora una empresaria exitosa.