Rechazo a ponerle plazo al proceso de paz manifestaron las Farc, que negocia en Cuba con el Gobierno el fin del conflicto armado.
El grupo guerrillero advirtió que se debe ir más allá de su participación en política.
Al conmemorar el quinto aniversario del fallecimiento de su histórico líder y fundador Pedro Antonio Marín, alias Manuel Marulanda Vélez o Tirofijo, las Farc dijeron que ese proceso "no puede estar sujeto a los vaivenes de la política electoral, a veleidades personales” ni “a limitaciones de tiempo y plazos perentorios que no consultan la realidad".
Las Farc y el gobierno del presidente Juan Manuel Santos emprendieron en noviembre de 2012 la negociación de una agenda de cinco puntos para poner fin al conflicto armado.
Las dos partes se encuentran negociado el desarrollo agrario del país, el primer punto de la agenda, que incluye además los temas de participación en política, drogas ilícitas, abandono de las armas y reparación a las víctimas.
Pese a que la negociación aún no ha evacuado el primer tema -fundamental para las Farc dado su origen campesino-, el presidente Santos ha manifestado su esperanza en que el proceso culmine antes de finalizar este año.
Además Santos, que tiene la posibilidad de buscar su reelección en 2014, tiene plazo legal hasta el próximo mes de noviembre para tomar una decisión al respecto.
La guerrilla indicó también que la negociación "se trata de abrir espacios para la participación política”, algo “que va más allá de las solas garantías para la actividad electoral".
Las Farc, con 8.000 integrantes según cifras oficiales, combaten al "Lograr superar el conflicto que lleva medio siglo, es un propósito de alcance y dimensiones históricas", dijo la guerrilla en el comunicado expedido a nombre del Secretariado del estado mayor central, su cúpula, y divulgado en su sitio web.
El grupo guerrillero insistió también en su demanda de ampliar las denominadas zonas de reserva campesina y criticó la reacción del ministro de Agricultura, Juan Camilo Restrepo, a ese pedido.
Restrepo rechazó esa pretensión de las Farc porque dijo que de esa forma se establecerían "republiquetas independientes".
Las Farc quieren ampliar en 9,5 millones de hectáreas de tierra las zonas de reserva campesina, de las que actualmente existen seis sobre un territorio de 830.000 hectáreas que ocupan unas 75.000 personas.
Dijeron que desean "continuar avanzando sin vacilaciones en la construcción de acuerdos", y en ese sentido manifestaron que si en "La Habana se alcanzan acuerdos ciertos que abran la posibilidad real de entrar a disputar el poder político (...), estamos dispuestos a dar ese paso".
Con todo, el Secretariado manifestó su complacencia con los avances que se han logrado en los diálogos de La Habana pero le piden al Gobierno acallar las voces de los enemigos del proceso de paz en el gabinete presidencial.
“Valoramos altamente el trabajo realizado por las partes y consideramos de gran importancia los borradores construidos de manera conjunta sobre temas del primer punto de la agenda, clara demostración de que es posible alcanzar acuerdos entre las partes enfrentadas; por lo mismo, consideramos que un propósito nacional de tal significación y trascendencia para toda la nación no puede estar sujeto a los vaivenes de la política electoral, a veleidades personales", señaló el documento.
“Seguiremos manteniendo en alto la bandera de la lucha por la paz con justicia social para nuestro pueblo hasta que sea una realidad", finalizó el documento difundido en Internet.