La guerrilla insistió en el marco de las conversaciones de paz de La Habana en convocar una asamblea constituyente que redacte una nueva constitución para Colombia, lo que es rechazado por el gobierno de Juan Manuel Santos.
"No estamos hablando de una Constituyente para después de la dejación de las armas, sino de una constituyente como tratado de paz y nuevo contrato social", dijo a la prensa el jefe negociador de las Farc, Iván Márquez, al criticar la negativa de su contraparte, Humberto de la Calle, a la convocatoria de esa asamblea.
"Al incluir como parte de la competencia de la constituyente, temas acordados en La Habana, éstos se refrendarían con el voto del pueblo. ¿Qué mejor manera de resolver los puntos de contradicción de las partes?", añadió el jefe guerrillero.
Márquez había propuesto hace una semana la convocatoria a una constituyente y aplazar un año las elecciones de 2014, lo que fue rechazado de inmediato por De la Calle. El presidente Santos también descartó postergar los comicios, lo que implicaría una extensión de su mandato.
De la Calle reiteró sus objeciones en un artículo publicado en la revista colombiana Semana, aduciendo que "una constituyente, más que un mecanismo de refrendación, es un escenario de nueva deliberación".
"El proceso de La Habana se basa en una agenda muy concreta para la terminación del conflicto. Su diseño no incluye una especie de refundación de la patria, esto es, no es el nacimiento de una nueva república", expresó en el artículo el jefe negociador del gobierno.
Márquez, quien es el número dos de las Farc, sostuvo que una nueva constitución es necesaria, pues sucesivas reformas a la carta de 1991 la han dejado "andrajosa".
"Las 38 modificaciones amañadas (...) convirtieron la Constitución del 91 en una Constitución andrajosa e irreconocible. La manosearon para imponer la reelección presidencial. Exacerbaron el presidencialismo", dijo.
Ambas partes desarrollan desde noviembre conversaciones para poner fin a un conflicto armado de casi medio siglo y hasta ahora han logrado consenso en el primero de cincos puntos de la agenda: el desarrollo agrario.
En el actual ciclo de pláticas, que se desarrollan en el Palacio de Convenciones de La Habana, las partes están discutiendo el segundo punto, participación política. Esta ronda culminará el sábado.