La guerrilla de las Farc exigió en La Habana la desclasificación de "todos los archivos" del paramilitarismo en Colombia, pues su erradicación es necesaria para lograr la paz.

"Es necesario abrir todos los archivos; que se desclasifiquen y se levanten las prohibiciones legales encubridoras de máximos responsables, que se impida la destrucción de archivos que ha venido ocurriendo", pidió el jefe negociador de la guerrilla, Iván Márquez, al iniciar el ciclo 29 de pláticas de paz con el gobierno de Juan Manuel Santos.

Márquez subrayó que "si ha empezado la marcha definitiva hacia el fin del conflicto colombiano, debe empezar también la del esclarecimiento de la verdad, y lo lógico es que no se demore más la resolución de un problema nodal como es el del surgimiento, permanencia y accionar nocivo de las estructuras paramilitares".

Ello debe ocurrir "independientemente del nombre que para efecto de la propaganda o de la justificación de sus acciones criminales se le quiera dar", señaló el representante de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).

"Sin el fin del paramilitarismo y sin el esclarecimiento de su origen y sus responsables, sería imposible cerrar las páginas sangrientas de nuestra historia escritas por la mano criminal de la guerra sucia y se haría incierto el fin del conflicto en el que estamos empeñados y haciendo nuestros mejores esfuerzos", añadió.

La delegación oficial encabezada por el exvicepresidente Humberto De la Calle se abstuvo de hacer declaraciones a la entrada de las pláticas de paz, iniciadas en noviembre de 2012.

El ciclo 29 que comenzó en esta jornada continuará con el tema de reparación de víctimas y tendrá 11 días de duración, dos de ellos de receso.

Una tercera delegación de víctimas, de las cinco previstas, debe comparecer ante ambas partes en ese lapso, en fecha aún no precisada.

La primera delegación viajó a La Habana con ese objetivo el 16 de agosto y la segunda el 10 de septiembre.

Las partes han consensuado tres de los seis puntos de la agenda: reforma rural (mayo de 2013), participación política (noviembre de 2013) y drogas ilícitas (mayo de 2014).

Además de la atención a las víctimas, quedan pendientes los temas del abandono de las armas por las FARC y el mecanismo para refrendar un eventual acuerdo de paz.