EL NUEVO SIGLO: ¿Qué está pasando con el Eln?

GUILLERMO LEÓN LEÓN: El proceso de la paz total y, en particular los diálogos con el Eln, empezaron con una debilidad del Estado que se demuestra en este tipo de acciones como las que acaba de hacer con el secuestro del señor Díaz. No hay instrumentos o herramientas para presionar en la mesa de negociaciones. La aproximación a la negociación es totalmente diferente a las que se habían llevado con anterioridad.

También se evidencia que el mando del Eln sobre el resto de las estructuras puede no ser tan cohesionado o no estar tan sólido como ellos tratan de decir, pero que realmente están fracturadas y fraccionadas. Por lo tanto, los que están sentados en esa mesa de diálogo no tienen el control sobre toda la organización armada al margen de la ley.

ENS: ¿Hay claridad en los protocolos?

GLL: El otro elemento que podría uno decir es que no haya quedado claridad en los protocolos del alcance, el significado y el contenido cuando se habló que deberían respetarse los Derechos Humanos y el Derecho Internacional Humanitario.

Esto va en relación con lo que decía Pablo Beltrán −en algunas declaraciones hace un tiempo− donde hablaba que el secuestro no se contemplaba y que ellos no iban a dejar esa práctica, porque con los plagios significaba la financiación de su agrupación criminal.

ENS. ¿No quedó establecido?

GLL: El hecho de que no haya quedado específicamente en el cese el fuego bilateral acordado, podría llevar también a que ellos se excusaran en esa razón para decir que requieren de esos recursos para poder sostener sus estructuras de esta red criminal.

Dicho lo anterior, bien puede uno mencionar que aquí queda en un estado de debilidad el mismo proceso, porque le resta credibilidad en dos sentidos: En primer lugar, pérdida de confianza de los colombianos que creen aún en el proceso de la paz total y, por el otro lado, este secuestro hizo algo que no había sucedido antes y es que internacionaliza la situación de lo que está pasando en el país y lo que está ocurriendo en estos diálogos.

El paradero

ENS: ¿No se sabe dónde está?

GLL: Por supuesto que es importante saber qué ha pasado con el padre de Luís Díaz, si realmente está aquí en Colombia o si lo sacaron hacia Venezuela, después que se reconoció por la misma organización del Eln el secuestro.

ENS: ¿SÍ está en Venezuela?

GLL: Si este es el caso, aquí entra un actor importante que es el gobierno del régimen que está establecido en Venezuela, porque es uno de los países garantes de este proceso. También sabemos que tienen una relación particular con el Eln. Así que será importante para el Gobierno en este caso recurrir al régimen de Nicolás Maduro con el fin de que pueda ayudar y se logre la liberación lo más pronto posible del padre de Luís Díaz. Sin embargo, el Gobierno está enfrentado a un gran reto y ver cómo evitar que se pierda la credibilidad en el proceso y que se pierda el respaldo de los colombianos con la búsqueda de la paz con este grupo al margen de la ley.

ENS: El Ministro del Interior, Luis Fernando Velasco, dice que este secuestro pone en riesgo el proceso de paz con el Eln. ¿Qué tan de acuerdo esta con ello?

GLL: No hay duda al respecto. Creo que el Gobierno Nacional debe tener una postura dura si quiere de alguna manera interpretar el sentir de los colombianos y ganar espacios de maniobra, porque si no actúa de esa manera, pues, obviamente, genera pérdida de confianza en el mismo y evidentemente que se retire el soporte de todos los colombianos que están indignados ante este infame crimen de quitarle la libertad a un colombiano.

Demostración de fuerza

ENS: ¿Qué se puede decir de la demostración de fuerza del EMC de las disidencias de las Farc, en El Plateado, en el Cauca?

GLL: Es importante precisar lo que significa El Plateado y particularmente el Valle del Micay. Todos sabemos que esta es un área estratégica, porque allí se encuentra el 70% de la coca sembrada en el Cauca.

Por otro lado, es un corredor estratégico de movilidad para el traslado de la droga y por supuesto de las economías ilícitas de la zona. Entonces esa disputa por un área estratégica es muy valiosa para estos grupos y por ello su intención de tratar de evitar perder el control sobre una región que le representa ingresos ilícitos a sus organizaciones criminales.

Es importante mantener y terminar de constituir la presencia del Estado en esa zona y empezar por el tema de la seguridad a través de la Fuerza Pública, no solamente para garantizar el proceso electoral que era supremamente importante por los riesgos que se corrían en erosionar nuestra democracia si ello no se lograba llevar a cabo y también por lo que representa el valor estratégico para estas organizaciones al margen de la ley.

ENS: ¿Es necesaria la presencia institucional en esta región?

GLL: Es necesario que se profundice, como lo mencionó recientemente el presidente en una visita al Cauca, la presencia institucional y que no se quede solamente la presencia militar en esta área de la geografía colombiana para consolidar la supremacía del Estado y no permitir que actores diferentes a los legítimamente constituidos sean la autoridad en esta región de la patria.

Cese al fuego

ENS: ¿Con este proceder se está violando por parte del EMC de las disidencias de las Farc el cese al fuego bilateral?

GLL: Por supuesto, estas actividades deben ser evaluadas rápidamente por el mecanismo de monitoreo y verificación. Sin embargo, tenemos conocimiento que este instrumento no está completamente instalado.

Por lo tanto, vamos a tener un organismo débil para hacer la evaluación de los hechos y determinar responsabilidades y si hubo una violación al cese bilateral acordado que amerite una acción del Estado.

ENS: ¿Deben estos grupos estar ubicados en un sitio determinado o georreferenciados para evitar supuestas violaciones al cese el fuego bilateral?

GLL: Eso se ha hablado, se dijo y se ha recomendado a través de diversos canales al Gobierno Nacional con el fin de que tenga en cuenta la dificultad que hemos tenido desde el mes de enero, cuando el 31 de enero se hacen los primeros ceses bilaterales con diferentes organizaciones armadas al margen de la ley.

Y, por no tener protocolos claros, de no tener acuerdos bien definidos y lograr que se acojan a los protocolos con los mecanismos de monitoreo y verificación, han llevado a unas falencias que han generado que la Fuerza Pública no haya podido actuar con la contundencia para cumplir su misión constitucional.