La ministra de Trabajo, Gloria Inés Ramírez, durante el Congreso de Acopi en Barranquilla, hizo referencia sobre el aumento del salario mínimo para el próximo 2023. Además, la funcionaria propuso congelar la canasta básica, pues el poder adquisitivo en Colombia llegó a afectar la inflación, que alcanzó el 11,4 %. Esta propuesta no pasó inadvertida para algunos economistas.
A través de la cuenta oficial del Ministerio se publicó un video en el que la jefa de cartera explicó: “El salario mínimo es una discusión que haremos en la mesa y es tripartita con los empresarios, con los trabajadores y estará el Gobierno participando. Son varios factores que hay que analizar en la mesa, los de productividad, los de salario, pero también la pérdida de valor adquisitivo de los salarios y otras condiciones que son complementarias al mismo salario, que tienen que ver con medidas extras como por ejemplo podemos pensar en una congelación de la canasta básica. Estos son los temas que vamos a trabajar con la mesa de concertación”.
De igual manera, la ministra agregó que los temas en la mesa de diálogo tienen que ir junto con la reforma laboral y la pensional. “Vamos a convocar próximamente la mesa de concertación y en ella vamos a tener unas subcomisiones que vamos a trabajar la reforma laboral, que es estructural; una reforma pensional, también estructural, y trabajaremos la mesa de concertación de salario mínimo”, recalcó.
Sin embargo, algunos economistas de peso criticaron la postura de la ministra y no la consideraron viable.
Una de ellas fue la economista María del Pilar López Uribe, docente especialista de la Universidad de los Andes y Ph.D. Desarrollo Económico de London School of Economics, quien indicó que congelar precios de canasta equivale a implementar control de precios. “No hay evidencia (incluida en Colombia en la década de los 30) donde esta medida funcione para contener incrementos en precios. Todo lo contrario, genera escasez y escalona más la presión al alza de precios”.
Otro de los que le replicaron a Ramírez fue el exministro Juan Camilo Restrepo, quien escribió en sus redes sociales: “Ya la ministra del Trabajo empezó a hablar de control administrativo de precios. Mal presagio. Argentina colocó bajo control administrativo 1.500 productos y hoy tiene una inflación del 70 %”.
Julio Romero, economista financiero y MBA, también se pronunció en sus redes sociales: "Control de precios: Mintrabajo. No más contratos de exploración petrolera: Minminas. Propuestas peligrosas –especialmente ante la situación económica mundial que se avecina– porque destruyen confianza en nuestra moneda".