Un estudio presentado por la directora de estudios económicos del BBVA Research, sostiene que el crecimiento de la economía será de 4,7 por ciento para el próximo año, lo que deja atrás los pronósticos pesimistas de algunos analistas.

Esta cifra corresponde efectivamente a que ya se prevé un cambio en el comportamiento del consumo, de la industria y de otros agregados macroeconómicos que van a impulsar el crecimiento.

Para este año, incluso, tanto el Banco de la República como el Gobierno consideran que el crecimiento del PIB va a estar cercano al 4 por ciento. En el informe del Banco español, se destaca que en lo que corresponde al cierre de este año, Téllez dijo que se proyecta una aceleración del crecimiento en el segundo semestre, que estará soportada en un mejor comportamiento de la construcción y también, de obras públicas. “BBVA Research estima que el crecimiento del PIB para 2013 será de 4,1%. Adicionalmente, este pronóstico se sustenta en que las ventas externas del país tendrían una mejor dinámica en lo que resta del año”.

Sin embargo, la Asociación Nacional de Instituciones Financieras (ANIF) insiste en un reciente informe en el que en el plano local las señales de desaceleración persisten. Síntomas de ello, es que en lo corrido de este año (a mayo) “la producción industrial acumuló una contracción del 2,9% y el comercio minorista, aunque ha venido recuperándose, creció sólo al 3% anual. A pesar del menor desempleo -9,2% en junio-, se observa un promedio de desocupación del 10,1% en los últimos 12 meses”.

Lo anterior, de acuerdo con el organismo, da sustento estadístico para pronosticar que la economía crecerá un 3,5% en el segundo semestre del año y un 3,8% para el total de 2013. “Nos ha sorprendido negativamente que la junta directiva del Banco de la República en su reunión mantuviera inalteradas las tasas de interés en 3,25% en momentos donde su propio staff les indicaba la conveniencia de reducir su pronóstico de crecimiento del 4,3% al 4%”.

Por ahora, el Banco de la República sostiene que en lo que resta de 2013 la economía se verá afectada por una disminución del gasto privado, lo cual llevó a que el pronóstico de crecimiento se haya reducido al 4%. También, preocupa la desaceleración del sector minero-energético que durante este año ha estado atravesando por huelgas y por una caída en la producción de carbón.