Economía británica se contrajo 0,3 por ciento | El Nuevo Siglo
Viernes, 25 de Enero de 2013

La convaleciente economía británica se contrajo un 0,3% en el último trimestre de 2012, atizando los temores de una tercera recesión inédita tras apenas un trimestre de repunte, pero el gobierno continuó defendiendo este viernes su cada vez más criticada política de austeridad.

Esta primera estimación de 0,3% divulgada por la Oficina Nacional de Estadísticas (ONS), que está sujeta a revisión en los próximos meses, fue peor que la contracción de 0,1% de promedio que preveían los analistas.

Para el conjunto de 2012, la ONS estimó que el Producto Interior Bruto (PIB)

británico tuvo un crecimiento "nulo", ligeramente mejor que la caída de 0,1%

prevista el mes pasado por el ministro de Finanzas, George Osborne.

La contracción del cuarto trimestre se debió en gran parte a una importante caída del sector de la producción y manufacturero (-1,8%) y a un estancamiento de los servicios, que representan alrededor de tres cuartas partes de la economía británica. Lo único que subió fue la construcción (+0,3%).

Osborne estimó que este dato era "un recordatorio" de la difícil situación económica que atraviesa el Reino Unido, y culpó una vez más de sus males a los gobiernos anteriores y a la eurozona, de la que su país no es miembro.

"Hacemos frente a problemas en casa por las deudas acumuladas durante muchos años y los problemas en el extranjero con la eurozona, donde exportamos la mayoría de nuestros productos, en recesión", declaró el ministro.

"Podemos rehuir estos problemas o afrontarlos, y estoy determinado a afrontarlos para que podamos continuar creando empleo para la gente de este país", agregó defendiendo su severo e impopular programa de austeridad para reducir un déficit sin precedentes que prolongó recientemente hasta 2018.

Un portavoz del primer ministro aseguró por su parte que David Cameron pensaba que su gobierno tenía "la política económica absolutamente correcta".

La economía británica salió en el tercer trimestre de nueve meses de recesión gracias a un fuerte crecimiento de 0,9%, pero los expertos advirtieron desde el primer momento sobre la excepcionalidad de este repunte atribuido en gran parte a los Juegos Olímpicos de Londres.

El Reino Unido, como numerosos países de Europa y del mundo, ya había sufrido una primera recesión de 15 meses (abril 2008-junio 2009) en la estela de la crisis financiera mundial de 2008.

Si el PIB volviera a contraerse en el primer trimestre de 2013, que podría verse afectado por la ola de frío que ha azotado el país este enero, la economía británica se sumiría en una tercera recesión inédita.

Ante esta posibilidad, cada vez son más las advertencias que ha recibido el Reino Unido de que su política podría estar asfixiando el crecimiento.

Si bien conserva todavía el rating más alto para las tres principales agencias de calificación, todas pusieron a finales de 2012 la "AAA" británica bajo perspectiva negativa, un aviso de que corre el riesgo de perderla.

El Fondo Monetario Internacional (FMI) rebajó por su parte una décima esta semana, a 1%, su previsión de crecimiento para el país en 2013, y sugirió que el gobierno debería moderar su austeridad.

El jefe economista del FMI, Olivier Blanchard, señaló el jueves en la BBC que el presupuesto previsto para marzo "podría ser un buen momento para estudiar la situación y hacer algunos ajustes" en las políticas de austeridad, y estimó que una "consolidación más lenta podría ser más apropiada".

Los analistas coinciden también en la necesidad de efectuar cambios en la política gubernamental. Para Vicky Redwood, economista principal de Capital Economics, "el hecho de que la economía se contraiga más de tres años después del final de la primera recesión sugiere que la actual posición política no está funcionando y hay que tomar más medidas".

AFP