Pese a que el Comité de Iniciativa Ciudadana puso fin a las protestas en la tarde del miércoles, los disturbios no cesan y habitantes en Urabá siguen manifestando su desacuerdo frente a la ubicación de varios peajes.
Incendios, bloqueos de vías, llantas quemadas y enfrentamientos se han tomado la región dejando hasta el momento una víctima mortal en Chigorodó.
El levantamiento del paro se dio inclusive porque varios voceros de la protesta indicaron que algunos menores de edad estaban siendo usados por adultos para generar violencia.
Sin embargo, pese a que se declarara nuevamente la normalidad en la zona, siguen produciéndose enfrentamientos entre manifestantes y la fuerza pública.
Así mismo, las autoridades se vieron obligadas a cerrar de forma preventiva el peaje Chaparral, ubicado entre Chigorodó y Carepa.
Según el coronel Soler, ya el Esmad estaba despejando la vía que conduce al mar, pues la congestión vehicular, que tiene parado el comercio y los puertos, alcanzan un estancamiento de más de cinco kilómetros. Sin embargo, según información entregada por fuentes del cuerpo de Bomberos, los manifestantes habían prendido fuego a la terminal de transportes de Chigorodó.
El 1 de enero inició el cobro de tres nuevos peajes en Urabá con el propósito de financiar las obras de la autopista transversal de las Américas.
Lo claro es que la comunidad ha reiterado que el precio de los peajes no es el centro de la polémica sino la ubicación de los mismos ya que están es al interior de la región.