El mundo del deporte me ha dado la oportunidad de conocer y compartir con atletas de todo tipo, así como de todos los lugares. A la cabeza se me vienen historias como la de Usain Bolt, un par de horas antes de su retiro en el torneo orbital de Londres cuando nos cruzamos en el lobby del hotel y nos sentamos a hablar un par de minutos sobre Falcao García; las conversaciones con Caterine Ibargüen y su esposo antes de las olimpiadas de 2016 cuando los tres sentados en un hotel de Bogotá soñábamos con la de oro; o cuando faltando unos meses para Río 2016 le dije a Óscar Figueroa en el gimnasio de pesas Miguel Calero de Santiago de Cali, después de una charla, “nos vamos a ver en Río y usted va a tener la medalla de oro”.
Cada una de estas historias, que seguramente les contaré durante estas semanas de encierro, han alegrado y entretenido más de una reunión. Hoy voy a comenzar con una historia que tiene un significado especial para mí, pues he sido testigo directo del crecimiento de este atleta. Hoy, en medio de la incertidumbre de no saber cuándo levantarán para los atletas la cuarentena y puedan volver a entrenarse, decidimos hablar y recordar varias historias y vivencias, además de su actualidad deportiva. Hoy, en las historias deportivas de EL NUEVO SIGLO: Jonathan Rivas.
A Jonathan lo conocí en 2016, justo después de haber hablado con Óscar Figueroa. Curiosamente, había viajado a Cali porque me habían contado que había dos jóvenes promesas del levantamiento de pesas colombiano que recién llegaban de un campeonato mundial en Perú en donde la habían sacado del estadio, uno de ellos era Jonathan, el otro Luis Mosquera, el hermano de Luis Javier Mosquera (medallista olímpico).
Hoy, confinado en su casa de Cartago y acompañado de su familia a causa del Covid 19 recibió a EL NUEVO SIGLO para hablar de todo un poco.
Para los que no se han ubicado y no tienen muy claro de quién les hablo, Jonathan Rivas es campeón mundial de pesos pesados en levantamiento de pesas; campeón en los Juegos Centro Americanos, Juegos Bolivarianos y Juegos Panamericanos, pero esto es mucho más adelante en el tiempo, regresemos a esa tarde en Cali cuando por primera vez nos sentamos con Jonathan a hablar de su vida y su carrera.
EL NUEVO SIGLO: ¿En qué categoría está ahora, cuánto está pesando?
JONATHAN RIVAS: En este momento estoy en la categoría de los 96 kilogramos, siempre me mantengo entre los 97-98 kilogramos de peso corporal y trabajo fuerte pensando en lo que podría ser una obtención de medalla en Tokio 2020.
El día que conocí a Jonathan me habló de sus sueños, de su historia, de lo que sentía estando en Cali, lejos de casa, le conté que ese año iba a cumplir uno de mis sueños, ir a los olímpicos de Río 2016 a trabajar, él me dijo que su sueño y su meta era llegar a Tokio 2020, le confesé entonces que era otro de mis sueños: poder ir a Tokio 2020; entonces, en medio de la emoción de la entrevista y del momento, hicimos la promesa que llegaríamos juntos a las justas asiáticas, claro, él en su deporte y yo en lo mío. Hoy estamos cerca de cumplir la meta, pero al mismo tiempo lejos, los dos a la espera.
ENS: A propósito de la cuarentena, ¿cómo ha sido su preparación durante estos días, continúa o paró?
JR: Cuando tú hablas del levantamiento de pesas, hablas de un deporte de marca, es un poco difícil porque cuando son deportes de tiempo o de marca, cuando se para durante dos días de entrenamiento, se recupera la forma física más o menos en unos 15 días de trabajo fuerte, entonces no podemos parar ni un solo día, solamente los domingos, esta situación de cuarentena afecta mucho, ya que, estamos entrenando para los Juegos Olímpicos, que están a escasos 4 meses. Estas medidas que se están tomando, de cerrarle los escenarios a los deportistas, sí son las medidas que hay que tomar, pero hay que hacer excepciones como, por ejemplo, la selección Colombia de levantamiento de pesas que en este caso solo llevaría 6 deportistas a los Olímpicos, yo creo que un equipo de 8 personas, 6 atletas y 2 entrenadores pueden concentrar y entrenar en un escenario deportivo.
ENS: ¿Qué les dijeron desde la Federación entonces?, ¿cancelado todo?
JR: Nos acaban de mandar a todos para la casa, cancelaron todas las concentraciones y nos dijeron rebusquen, busquen la manera de seguir entrenando en casa que ustedes se van a recuperar y van a llegar a los Juegos Olímpicos, ósea, se olvidaron que un deporte como las pesas no puede parar sus entrenamientos. A mí me toco tener una reunión con la subsecretaria del deporte en Cartago para que me prestaran algo de implementación, para llevármela a la casa y mirar qué entrenamiento hago para no perder del todo mi forma física.
Hoy Jonathan ya está clasificado a los Juegos Olímpicos de 2020, estará al lado de otros 5 colombianos tratando de darle más de una alegría al país.
Colombia ya tiene clasificados a 4 hombres, queríamos clasificar a las dos mujeres, pero el tema de la boldenona puso en duda el tema de la clasificación de las mujeres, aunque ya tenemos dos clasificadas: Mercedes Pérez en los 64 kilogramos y nuestra medallista olímpica Leidy Solís.
ENS: Ya nos contó quiénes son las mujeres, ¿pero el grupo de 4 hombres por quiénes está conformado?
JR: Bueno, está Francisco Mosquera gran aspirante a medalla, lo peor que le podría pasar a Francisco en las olimpiadas es que gane una medalla de bronce; Luis Javier Mosquera, que ha tenido problemas de salud en este ciclo olímpico, pero gracias a Dios, en el año clave que es este ha salido de todos los problemas físicos y yo lo veo como mínimo para una medalla de bronce. En los 81 kilogramos está Santiago Rodallega, un chico de tan solo 23 años que ha venido dando buenos resultados a nivel mundial; en este momento, está tercero en el ranking mundial, como mínimo podría obtener un bronce y en los 96 kilogramos estoy yo, que también tengo posibilidad de medalla. Si Dios quiere, vamos por las medallas de las pesas a Tokio.
Va terminando nuestra charla y de repente Jonathan sale con una perla, le pregunto sobre el sueño que tenía de llegar a Tokio y su clasificación, cuando de repente me dice antes de despedirse, “yo espero que nos podamos ver este año en Tokio, para darle la primera entrevista a usted después de ganar una de las medallas”, quedo sorprendido y al notar mi sorpresa Rivas me dice, “¿no se acuerda que ese día en Cali, le prometí que si llegaba a Tokio y ganaba, con el primero que iba a hablar era con usted?” Luego de hablar con él me senté a revisar el video de la conversación que tuvimos aquella tarde de 2016 en Cali, al final del video le digo a Jonathan, “nos vemos en Tokio ¿entonces?”, y me respondió, “sí, y al primero que le doy entrevista, si gano, es a usted se lo prometo”. Bueno, hoy aprovecho este espacio para responderle a Jonathan, en Tokio nos vamos a ver y lo voy a esperar abajo, para ser la primera entrevista que le mande al país la alegría de su victoria. Las promesas se cumplen.
JONATHAN RIVAS es una de las grandes esperanzas de Colombia para aumentar su cosecha de medallas de oro en los Juegos Olímpicos. /COC