Con el título mundial en el horizonte y un eventual duelo de prestigio ante el Liverpool por el camino, el campeón mexicano de la Concacaf Monterrey deberá antes superar al anfitrión catarí Al-Sadd dirigido por el español Xavi Hernández, hoy en cuartos de final del Mundial de Clubes.
Luego de coronarse hace poco más de siete meses como campeón de la Liga de Campeones de la Concacaf al imponerse a Tigres en una final 100% ‘azteca’, los ‘Rayados’ inician en el estadio Jassim Bin Hamad de Doha un frenético final de año 2019 que puede ser histórico para el equipo de la ciudad del norte de México.
El conjunto dirigido por el argentino Antonio Mohamed se clasificó el pasado fin de semana para la final del torneo Apertura-2019 tras batir al Necaxa, y se jugará el título los días 26 y 29 de diciembre ante el América.
Los ‘Rayados’ quieren llegar a esa cita con la vitola de campeones del mundo, o al menos con el honor de mejorar el tercer puesto, techo de un equipo mexicano en el Mundial de Clubes.
“Esta vez puede ser, por la experiencia que el club acumuló en varios Mundiales de Clubes y también por el plantel que tenemos ahora. Creo que Monterrey en el transcurso de estos años ha formado un plantel muy competitivo, Monterrey tiene jugadores de selección en muchos países de América y aparte tenemos una estructura a nivel de club que nos respalda”, afirmó Mohamed.
Un hipotético pase a la final sería un hito histórico para el fútbol mexicano, después de que Necaxa (2000), Monterrey (2012) y Pachuca (2017) ocupasen el tercer cajón del podio.
Pero el reto se antoja complicado para un Monterrey que en caso de ganar al Al-Sadd se enfrentaría en semifinales al Liverpool inglés, campeón de la Champions League y líder intratable de la Premier.
El primer paso para el cuadro ‘azteca’ es el Al-Sadd, clasificado a la cita mundialista en calidad de campeón del campeonato de Catar, sede del torneo.
El equipo dirigido por el legendario centrocampista español Xavi Hernández se perfila como una buena ‘piedra de toque’ para Monterrey, que deberá hacer frente al ‘innegociable’ estilo de toque y posesión del técnico catalán, cuyo equipo tiene en el español Gabi y el argelino Baghdad Bounedjah a sus principales estrellas.
Pero los cataríes deberán mostrar una mejor cara que la ofrecida en su sufrida victoria en la prórroga de cuartos de final ante el modesto Hienghène Sport (3-1) de Nueva Caledonia.
En ese partido sufrió una lesión muscular el delantero Abdulaziz Al-Ansari que le impedirá participar en lo que resta de torneo. Pero tampoco Mohamed tiene su plantel al completo, y el volante Celso Ortiz y el delantero Vincent Janssen causarán baja.
Horas antes de ese partido, del duelo entre el Al-Hilal de Arabia Saudita y el Esperance de Túnez, campeón de Asia y de África respectivamente, bajo arbitraje del chileno Roberto Tobar, saldrá el rival del Flamengo brasileño en la otra semifinal. El perdedor se medirá por un consuelo menor con el derrotado entre el Monterrey y el Al-Sadd.
Justamente, Flamengo se entrenó en su sede de las afueras de Rio de Janeiro con su plantilla completa bajo las órdenes del técnico Javier Jesús, antes de viajar ayer a Catar.
El medipaunta Everton Ribeiro aseguró en una rueda de prensa que el equipo tiene que centrarse en disputar la semifinal que les espera en Catar antes de pensar en la final, en la que podrían verse la cara con el Liverpool inglés, titular de la Liga de Campeones.
“No podemos descuidar la semifinal. El adversario también querrá llegar a la final y nuestro pensamiento está centrado para el partido del martes. Después, venciendo la semifinal pensaremos en la final”, comentó.
El Flamengo quiere reeditar en Catar el título que consiguió en 1981, cuando se impuso en la final de la Copa Intercontinental al Liverpool por 3-0./Con AFP
EL EQUIPO dirigido por el legendario centrocampista español Xavi Hernández se perfila como una buena ‘piedra de toque’ para Monterrey.