El regreso a los cuadriláteros del legendario Mike Tyson en un combate de exhibición el sábado ante Roy Jones Jr., ambos por encima de los 50 años, ha despertado tanta expectación como suspicacias dentro del mundo del boxeo.
En una conferencia de prensa el viernes, Tyson reconoció que no esperaba volver a pelear a sus 54 años.
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"No pensé que viviría tanto tiempo. Ha sido tan intenso", afirmó en el evento previo a la pelea en Los Ángeles (California). "El solo hecho de que yo exista es un éxito".
Tyson asegura que no se parece en nada al boxeador que fue sorprendentemente noqueado por el irlandés Kevin McBride en 2005, la derrota con la que cerró su carrera.
"No sé quién era entonces. Estoy muy cómodo con quien soy ahora", afirmó. "No tenía ningún interés en mi última pelea. Ahora me interesa".
Tyson, que tiene un balance de 50 victorias y 6 derrotas con 44 nocauts, aseguró que quiere controlar desde el principio la pelea ante Jones Jr., de 51 años y con un registro de 66-9 con 47 nocauts.
"Voy a ir directo a por él desde la campana y veré qué pasa", avanzó. "Va a ser entretenido. Es un luchador. Yo soy un luchador. Estaremos ahí dentro lanzando golpes. Cualquier cosa puede pasar".
Jones, que se despidió de los rings con un triunfo en 2018, planea tomarse el arranque con precaución hasta constatar cuánto de "Iron Mike" queda en Tyson.
"Quiero encontrar mis formas de atacarlo. Es muy peligroso cuando está a su distancia", dijo este ex campeón mundial en cuatro categorías.
Las especulaciones sobre el retorno de Tyson comenzaron con unos vídeos que publicó en mayo, que tuvieron más de 12 millones de vistas en Instagram, en los que el gran dominador de los pesos pesados entre las décadas de 1980 y 1990 lucía de nuevo en forma.
El revuelo fue creciendo hasta que su regreso se concretó en julio con el anuncio de la pelea de exhibición ante Jones Jr.
El combate, que se retransmitirá en pago por visión, se celebrará a puerta cerrada por culpa de la pandemia de coronavirus y será el primer evento deportivo que se dispute desde marzo en el Staples Center, el hogar de los Lakers de la NBA.
La oportunidad de volver a ver en acción a Tyson ha generado una mezcla de emoción, nostalgia y curiosidad entre los aficionados al boxeo si bien la pelea, que no tiene carácter oficial, ha sido fuertemente regulada debido a la avanzada edad de los púgiles.
Pruebas antidopaje
Para permitir la celebración del combate, la Comisión Atlética de California (CSAC) promulgó unas reglas especiales para preservar la integridad física de sus protagonistas.
Tyson y Jones Jr. están sometidos a exámenes médicos completos y pruebas antidopaje en las que, según reportan medios estadounidenses, no se controlará si han consumido marihuana. El propio Tyson cuenta con varios negocios dedicados a la plantación y venta de productos relacionados con la marihuana.
El combate se dividirá en ocho asaltos de dos minutos y los púgiles, aunque no portarán casco protector, sí emplearán unos guantes más ligeros (12 onzas), que reducen la potencia de los golpes.
Las puntuaciones serán ofrecidas por miembros del Consejo Mundial de Boxeo (CMB) con fines de "entretenimiento", ya que no declararán un ganador oficial. Se evitarán los nocáuts y se detendrá la pelea si alguno de los boxeadores sufre un corte grave.
Pelea de riesgo
Tyson ha trabajado su cuerpo a conciencia en el gimnasio, determinado a reencauzar una vida que ha pasado por todo tipo de altibajos, desde alcanzar la gloria deportiva a transitar por la cárcel, la adicción a drogas y la ruina económica.
La confianza de Tyson le lleva a plantearse más apariciones en el ring el próximo año aunque otras figuras del boxeo han advertido de los riesgos que correrá el sábado.
"Es una locura transitoria. Nos ha pasado a todos", dijo George Foreman, quien fue el campeón de pesos pesados más veterano de la historia con 45 años.
Desde el punto de vista médico "el verdadero riesgo a esta edad está en el corazón y el cerebro", expuso el doctor Amine Mokhtar Benounnane, miembro de la comisión médica de la Federación Francesa de Boxeo.
"Tyson ha sufrido nocauts y sabemos lo que ha pasado fuera de los rings. No podemos decir que haya preservado su salud. Eso cuenta aunque (la pelea) sea aparentemente más una demostración que un verdadero combate", señaló el médico.