Sentimientos encontrados invaden a los jugadores del fútbol profesional, quienes por un lado anhelan volver a las canchas y por otro, sienten el temor a contagiarse de coronavirus.
En Colombia todavía no es claro cuándo se retomarán las competencias y menos si se reiniciará la Liga Betplay p si por el contrario se adopta alguna de las propuestas, como la surgida en las últimas horas de jugar en cuatro sede, cada una con la presencia de cinco equipos y una final en alguna de esas ciudades.
De momento, se tiene establecido de manera tentativa, que a finales de junio los equipos puedan volver a los entrenamientos pero de manera individual y que en la medida en que las condiciones lo permitan, se van dando pasos.
Ayer se conoció que una posible fecha, si el coronavirus lo permite, el torneo rentado se podría reanudar hacia finales de agosto.
Pero mientras se concreta la fecha para el regreso a los estadios, sin público, algunos equipos mantienen a sus jugadores trabajando virtualmente y otros siguen en vacaciones.
Ese es otro factor a tener en cuenta. De la Liga solo cinco o seis planteles se mantienen activos, mientras que otros dieron vacaciones, despidieron jugadores o licencias no remuneradas, por lo que la puesta a tono, han dicho los preparadores físicos, lleva por lo menos tres o cuatro de semanas, más trabajos con balón.
Ayer nada más, el profesor Wilhelm Bloch, de la Escuela Superior del Deporte de Colonia, Alemania, alertó que pese al estricto protocolo sanitario previsto para poder reanudar la Bundesliga, los futbolistas se exponen a lesiones pulmonares “irreversibles” en caso de infección por el nuevo coronavirus.
“No es seguro al 100%. El protocolo minimiza los riesgos, pero no existe una protección al 100% y aún existe el peligro de ver a un jugador o un miembro del cuerpo técnico infectado por el virus. El riesgo es difícil de calcular. Depende naturalmente del ambiente y de la situación general en el país. Los futbolistas no están en cuarentena total, conviven con sus familias, aunque hayan recibido consignas para limitar sus contactos. Y también está el riesgo durante los partidos. Todos serán sometidos a test, pero los test de coronavirus no funcionan todos perfectamente, hay un margen de error relativamente importante”.
Es por ello que algunos jugadores, aunque reconocen que tienen ansiedad por volver a jugar, por competir, por sentir la tensión que genera un partido oficial, no ocultan su temor a posibles contagios o enfermedades derivadas del contacto con sus colegas.
Andrés Ricaurte, jugador del Medellín, aseguró al programa ‘La Disidencia del fútbol’ que “no (estoy de acuerdo con regresar), pero habría que esperar el momento. Ya lo hablé con Aldo Bobadilla (técnico del DIM), que si ponen cuarentena, que la gente no puede salir, por qué los jugadores sí podemos salir a exponernos. No deja de ser un riesgo”.
Otros, como Andrés ‘Riflecito’ Andrade, consideran que “es claro al decir que se deberán cumplir cada uno de los protocolos de la mejor manera para evitar contagios”.
“Quiero ya sentirme libre y decir que puedo ir a la cancha, que puedo ir a entrenar. La verdad me hace una falta increíble. Lo que está pasando, tenemos la posibilidad los equipos de fútbol de empezar individual y seguir todos los protocolos al pie de la letra. Los jugadores estamos conscientes de la situación que se vivió y no queremos repetirla”, dijo a Win Sports.
En concordancia con lo que ha dicho el Gobierno Nacional, va la Conmebol, que ayer se volvió a reunir para analizar la situación, poro lo único claro que anunció es que se mantiene la fecha para el inicio de la eliminatoria, en septiembre, y que las copas Libertadores y Suramericana, siguen suspendidas.
“La Conmebol continúa trabajando para la vuelta del fútbol con todas las medidas de prevención necesarias, por ello el Consejo de la Confederación reunido hoy a través de videoconferencia analizó los posibles escenarios que el fútbol suramericano deberá afrontar en los próximos meses”, señaló en un comunicado.