El pelotón, en shock tras el fallecimiento de Lambrecht | El Nuevo Siglo
AFP
Martes, 6 de Agosto de 2019

Brazaletes negros, minuto de silencio y salida de la etapa a través de un portal negro... Los corredores de la Vuelta a Polonia homenajearon ayer al joven ciclista belga Bjorg Lambrecht, fallecido el lunes en la carrera y honrado por sus compañeros en todo el mundo.

Horas después del anuncio de la muerte de la joven promesa belga de 22 años tras una caída en carrera, los organizadores de la prueba comunicaron que el recorrido de la cuarta etapa de este martes, entre Jaworzno a Kocierz (sur), se reduciría de 173 a 133,7 km y que no tendría incidencia en la clasificación general.

“Es una excelente decisión”, opinó el ciclista polaco Marek Rutkiewicz unos minutos antes del inicio de la 4ª etapa a la televisión TVP Sport. “Eso nos permitirá aliviar nuestros corazones, hablar entre nosotros en el grupo. El lunes el ambiente estaba en su punto más bajo”.

Tan pronto como comenzó la etapa, los Lotto Soudal rodaron agrupados al frente del pelotón, detenido en el kilómetro 48, distancia del accidente fatal de Lambrecht, para un segundo minuto de silencio. Al mismo tiempo, la fiscalía de Rybnik (sur) abrió una investigación sobre las causas del accidente.

Cada siete kilómetros, los diferentes equipos se relevaron en la cabeza del pelotón, siempre en silencio. Los espectadores, en las carreteras, se sumaron al homenaje con banderas de Polonia y de Bélgica con un crespón negro.

“Ha sido una jornada muy especial, una jornada de duelo. Ayer, discutimos hasta tarde para saber qué hacíamos hoy y cómo homenajear a Bjorg Lambrecht”, declaró el director de la carrera Czeslaw Lang.

Los corredores “necesitaban un momento de reflexión, de recogimiento, de recuerdo”, añadió.

Paralelamente, la fiscalía de Rybnik anunció la apertura de una investigación para esclarecer las causas del accidente.

El lunes, la estupefacción golpeó a los participantes de esta prueba del World Tour cuando se enteraron de la muerte de su compañero al cruzar la meta de la etapa, en Zabrze.

“Nos separaban unos ocho corredores”, explicó Rutkiewicz. “Vi cuando perdió el control de su bicicleta. Enseguida se cayó en la zanja. Desgraciadamente estaba esta pasarela de hormigón. No había ninguna opción de escapar, se cayó dentro directo. Le vi acurrucado sobre sí mismo, al fondo de la zanja. Continuamos la carrera pensando que no le había pasado nada grave. La trágica noticia nos esperaba en meta”./AFP