Tras sostener que “nuestros trabajadores viven el momento más difícil de nuestra historia, la destrucción de la economía por modelo castro-comunista del Gobierno”, el gobernador de Miranda, Henrique Capriles, aseguró que “no hay cambio posible sin trabajadores y nuestro pueblo pobre. A ellos nuestro llamado a impulsar cambio de modelo Castro comunista fracasado”.
En sus trinos de ayer, Capriles instó a los trabajadores a marchar “en rechazo al modelo castro-comunista fracasado” y expresarse pacíficamente pero con contundencia.
“Nuestro proyecto progresista busca que trabajo esté bien remunerado, te permita vivir bien, comer bien y dormir tranquilo. Lo que hoy no hay”, tuiteó, asegurando que llegará el día donde en Venezuela no se hable más de trabajadores oficialistas u opositores “sino trabadores venezolanos, todos somos todos”.
“Un país dividido no avanza, no progresa, hay que unir a nuestra Venezuela de punta a punta, sin revanchismo, ni odios. ¿Es posible? Sí creo”, finalizó.
Las manifestaciones de Capriles contrastan con las del vicepresidente Jorge Arreaza, para quien "todo venezolano trabajador, sindicalista que reflexione, que vea hacia el pasado y ve hacia el futuro tiene que acompañar al presidente Maduro y al pueblo en este desafío por hacer que el trabajo, sea el proceso que transforme a la sociedad".
Arreaza anotó que "hoy además tenemos que celebrar que nuestro ministerio que es para el trabajo, ahora se llama Ministerio del Poder Popular para la Protección del Proceso Social del Trabajo; concepto que surgió de las reflexiones del comandante Chávez con la clase obrera, que venía discutiendo desde hace año".
"En febrero, el desempleo fue el nivel más bajo, en al menos 20 años con el 7,2 por ciento, eso quiere decir que el 93,8 por ciento de los venezolanos están empleados", declaró.
Para el alto funcionario venezolano, desde el Gobierno trabajan por "mejorar la calidad del trabajo" al señalar que en 15 años se han realizado 25 aumentos salariales. No dijo nada sobre el efecto de la inflación sobre esos aumentos salariales. Indicó que "no estaremos conformes hasta que el desempleo llegue a su mínima expresión".