Una muestra en donde se propone un acercamiento singular a la pintura, las cuales sumergen al espectador en un universo pictórico que evoca las relaciones entre la tierra y el cosmos es lo que se podrá apreciar en la Alonso Garcés Galería con la exposición En el abismo de Carlos Salas.
Este jueves la muestra se abre al público para revelar un trabajo en donde los lazos familiares se fortalecen, pues Carlos durante el proceso de creación de su obra mantuvo un diálogo a distancia con su hija Ana María, mientras ella escribía el proyecto de un documental sobre el taller de su padre. Una serie de cruces y coincidencias empezaron a aparecer y a alimentar tanto la labor pictórica como la cinematográfica.
Hace 25 años la galería Garcés Velásquez invitó a Carlos Salas a hacer una exposición. Esta muestra se hace finalmente realidad a partir, pues el artista, que se caracteriza por hacer exposiciones en las que el juego con el espacio es importante, afirma que para esta creación pudo “olvidar” el de la galería, ya que le es muy familiar. Por esta razón, la instalación actual de sus obras se plantea con variables más complejas.
En el abismo está compuesta por cuatro cuadros en la pared del fondo del espacio, dando la impresión de una enorme ventana, a su derecha, se exhibe un gran cuadro rectangular cuyo proceso de elaboración fue el más largo, el cual esta acompañado de una serie de pequeños formatos que se realizaron paralelamente. En el lado opuesto se exhiben seis cuadros circulares que son el eje de la exposición, con otras obras.
En esta exposición el color azul tiene un lugar protagónico: “Cuando empecé a pintar, mi color favorito era el azul. Para mí era un color seductor y me negué a él durante años. Hasta ahora volví a introducirlo de forma tan preponderante en mi pintura” afirma Carlos Salas.
Así mismo, en la sala alterna de la galería se exhiben elementos de referencia que surgieron poco a poco durante las conversaciones vía electrónica entre el artista y su hija Ana María, con el fin de que los visitantes puedan entrar en la atmósfera en la que se generó y evolucionó la obra. Estos diálogos, fragmentos de las películas, los libros y varios documentos que se mencionan en ellos están disponibles para la consulta en una gran mesa de trabajo.
Para Carlos Salas, su proceso de creación artística es el resultado de una serie de entrelazamientos, que se han dado en este caso con películas como Nostalgia de la luz y proyectos como el del crítico John Berger, que sostuvo un diálogo con su hija Katya en un homenaje que le rindió el Museo del Prado.
Según Carlos, es posible que todos los artistas tengan relaciones poderosas con sus hijos, pero no todas se manifiestan en la forma de un proyecto artístico. De su época como director de Galería y revista Mundo, Salas recuerda el texto de Juan Carlos sobre su padre Fernando Botero, que inspiró la exposición y edición de una revista dedicada a este artista.
El proyecto de documental de Ana María Salas titulado En el taller no es solamente un ejemplo tangible de esa relación, sino también otro elemento que se entrelazó, dando forma a la exposición En el abismo.