Fue lanzado el primer Bono de Impacto Social en Colombia, un modelo innovador de financiación de programas sociales que pagará por éxito al obtener resultados de empleabilidad de población vulnerable.
Este primer bono busca beneficiar a 514 personas, principalmente pobres y desplazadas y que se encuentren desempleadas en Bogotá, Cali y Pereira, a través de una inversión de $2.200 millones de pesos por medio de alianzas de financiación con el sector privado y la cooperación internacional.
Luego de que en noviembre del año pasado se firmara un convenio interinstitucional para poner en marcha en el país este nuevo modelo de financiación, se hace realidad este primer bono -de tres que se realizarán- que será también un proceso de aprendizaje para Colombia y los países en desarrollo, en la generación de conocimiento y recomendaciones para los futuros diseños de proyectos bajo este mismo modelo.
El lanzamiento del primer Bono de Impacto Social es una demostración de la eficiencia que se logra cuando se juntan los sectores público, privado y social, para conseguir resultados concretos relativos a la resolución de los problemas sociales que aquejan a Colombia.
La directora de Instiglio para Colombia, Mariana Sarasti, dijo que a través de este mecanismo se busca focalizar la inversión social en el país especialmente a la población vulnerable y con los resultados observados se paga el servicio a quienes realizaron el trabajo.
Dijo a EL NUEVO SIGLO que lo que se busca es asegurar que cada peso invertido para aliviar la pobreza tenga el mayor impacto posible en la vida de hombres, mujeres y niños afligidos por ella.
Financiación social
Los Bonos de Impacto Social son un modelo innovador que permiten financiar programas sociales bajo un esquema de pago por éxito. Este tipo de financiación busca incrementar la efectividad de la inversión social, la innovación del sector público, promover la flexibilidad para resolver problemáticas sociales y lograr una mejor asignación de los recursos públicos.
Dentro de este esquema, el pagador -quien puede ser el Gobierno sólo o con otros interesados, se compromete a pagar los resultados definidos para el programa social, una vez estos sean alcanzados y verificados independientemente por un tercero. Para esto, en un primer momento, los inversionistas de impacto (privados) han proporcionado los fondos iniciales para que un operador lleve a cabo dicho programa o servicio en beneficio de una población vulnerable. Todo esto sucede dentro de un contrato de pago por resultados, de forma tal que se incentiva al sector privado a participar en proyectos sociales al crear oportunidades de inversión que incluyen un retorno, aunando esfuerzos con el Gobierno para realizar intervenciones que generen mayor impacto, explicó la directiva.
El primero en Colombia
Señaló que con los Bonos de Impacto Social se le permite al sector público contar con mecanismos innovadores de inversión social que incrementan la efectividad en el uso de los recursos y que generan aprendizajes para seguir avanzando en la superación de la pobreza de manera integral en el país. Lo que se propone con el esquema es unir esfuerzos no dispersarlos y obviamente tener una mayor transparencia y resultados óptimos en el manejo de los recursos y desarrollo de los programas.
Colombia es el primer país en vía de desarrollo en entrar en esta tendencia de inversión social que ha arrojado buenos resultados en países de mayor nivel de progreso.
En opinión del cofundador y socio gerente de Instiglio, Avnish Gungadurdoss, “para el campo del desarrollo internacional y la comunidad de expertos en financiación basada en resultados, este proyecto allanará el camino al responder preguntas que hasta ahora sólo podían teorizarse como cuándo y cómo desarrollar un BIS en nuevos contextos y de cómo un BIS puede realmente cambiar el campo del desarrollo económico y social". Con este BIS, Colombia crea el primer bono del mundo en un país en desarrollo, posicionándose, según Avnish, "como el líder en este tipo de innovación social, no solo en América Latina, sino entre todos los países de su nivel de ingresos”.
Opiniones
“Para el BID y el Fomin ha sido especialmente importante ayudar a acercar a los inversionistas privados de impacto a la financiación de proyectos sociales del Gobierno, en este caso al empleo formal para las personas más vulnerables”.
Promover que la financiación de la implementación y el riesgo del programa corran por cuenta de los inversionistas, mientras que el Gobierno paga sólo si se logran los resultados esperados y verificados por expertos independientes, es un cambio fundamental en la manera de financiar programas sociales en Colombia. Al generar mayor eficiencia en el gasto público social, mejorar y especializar los servicios prestados en programas sociales y lograr que las decisiones se tomen con base en datos y evidencias, el Bono de Impacto Social logra demostrar que una innovación de esta naturaleza motiva a cambios en la mentalidad para acometer siempre nuevas y mejores iniciativas entre el sector público y privado en la búsqueda de soluciones conjuntas a los problemas de los más pobres de nuestra sociedad. Si bien este es el primero de tres Bonos que se implementarán en Colombia, al final se espera obtener un modelo que sea replicable y escalable tanto en otros programas sociales del Gobierno nacional como a nivel subnacional y en el resto de la región de América Latina y el Caribe.
Ha sido especialmente grato unir esfuerzos también con la Cooperación Técnica Suiza, a través de Seco. Este lanzamiento demuestra que desde Colombia y los países de ingresos medios, se pueden acometer grandes iniciativas que los ponen al nivel de los países de mayores ingresos en el mundo”, manifestó Rafael de la Cruz, representante del Grupo BID en Colombia.
“Desde la Fundación Corona creemos en la importancia de la creación de un nuevo modelo innovador que aporte a solucionar problemas sociales en Colombia de forma efectiva. Estamos convencidos que enfocarse en los resultados de empleabilidad, ayuda a la generación de ingresos y la movilidad social de población vulnerable para la superación de la pobreza. Nuestra tarea desde Fundación Corona será aportar nuestra experiencia, conocimiento y aprendizajes en temas de inclusión laboral para fomentar el logro de resultados exitosos”, dijo Ángela Escallón Emiliani, directora ejecutiva Fundación Corona.
“Dentro de las líneas de acción de la Fundación Mario Santo Domingo, hemos encontrado que los esfuerzos dirigidos a temas de empleabilidad son una necesidad para las familias más vulnerables del país. Este programa innovador de empleabilidad donde se unen empresa privada y sector público fomentará el mejoramiento de las condiciones socio-económicas de comunidades en situación de pobreza, contribuyendo a la inclusión social en el país,” dijo Pablo Gabriel Obregón, presidente Fundación Mario Santo Domingo.