Sala Penal de la Corte Suprema de Justicia archivó un proceso penal abierto a petición del alcalde de Bogotá, Gustavo Petro, ante unas acusaciones formuladas públicamente en el 2008 por Álvaro Uribe.
La investigación fue pedida por Petro, quien se desempeñaba entonces como Senador, ante una acusación de Uribe en un evento en Antioquia, donde afirmó que el alcalde y la senadora Piedad Córdoba “interfirieron con la justicia al manipular testigos”.
Ante la petición de Petro, la Corte pidió el testimonio de Uribe,quien por escrito afirmó que “su comentario se originaba en el conocimiento que tuvo de las declaraciones de los señores Libardo Duarte, interno en la cárcel La Picota, y Sergio Tovar Pulido, oficial retirado de la Policía Nacional”.
Dijo también, según consta en la sentencia, que Petro y Córdoba habrían ofrecido dinero a Francisco Villalba, único condenado por la masacre de El Aro, para que involucrara a Uribe en esos hechos delictivos.
La Corte Suprema dice que “visto el material probatorio recaudado, en relación con los contactos realizados entre los excongresistas Piedad Córdoba y Gustavo Petro con Libardo Duarte y Sergio Tovar, en el cual se cuenta la versión que directamente ofrecieron los mencionados señores, no queda opción diferente a la de concluir que el mencionado delito de soborno nunca existió”.
Al tumbar la acusación de Uribe, la Corte explica que “son claros y contundentes los testigos supuestamente manipulados –según las informaciones con que se contaba, al inicio de la presente indagación- en señalar que los congresistas indiciados no les pidieron que declararan falsedad alguna”.