Dotar a la región de un fondo de contingencia disponible para los países más vulnerables del área busca el Banco Interamericano de Desarrollo.
Así se dio a conocer en su 53 Asamblea anual que se desarrolla en Montevideo, dominada por las tensiones comerciales en la región.
El presidente del organismo, el colombiano Luis Alberto Moreno, presentará el domingo a los gobernadores del Banco -los ministros de Finanzas de los 48 países miembro de la institución- los detalles de una propuesta para crear este fondo, informaron a la AFP fuentes del organismo.
Se trata de un instrumento que plantea reunir "varios miles de millones de dólares" que quedarían disponibles para situaciones en las cuales los países más vulnerables necesiten un respaldo financiero, indicaron las fuentes que pidieron no ser identificadas.
El dinero quedaría apto para utilizar tanto para paliar impactos económicos externos como desajustes internos, o también situaciones de catástrofe natural, señalaron los informantes.
Las fuentes reconocieron que, a diferencia de lo que ocurre con el proyecto de cortafuegos anti-crisis que maneja Europa, de cientos de miles de millones de euros, la propuesta del BID apunta a subsanar situaciones de menor escala.
El BID, cuya capitalización supera los 170.000 millones de dólares, "no podría rescatar a Brasil", la mayor economía del continente con un PIB de 2,38 billones de dólares en 2011, ejemplificó una de las fuentes. En cambio, sí podría atender situaciones puntuales tanto en ese país, como problemas de economías de mayor vulnerabilidad, precisó.
El BID tiene una capacidad potencial de préstamo de unos 12.000 millones de dólares anuales tras el aumento de su capitalización decidido en México en 2010, y con 48 miembros -varios extrarregionales- es el mayor organismo de financiamiento para América Latina.
Moreno también realizará propuestas para mecanismos de financiamiento de proyectos de seguridad regionales, en una asamblea que se extenderá hasta el lunes y cuyo tema central es la participación de la juventud en la sociedad.
Sin embargo, las discusiones están permeadas por fuertes tensiones entre los países de América Latina, en momentos en que los excedentes comerciales comienzan a achicarse y campea el proteccionismo.
Varios ministros de Economía de la Unión de Naciones Sudamericanas (Unasur), se reunieron en la mañana del sábado en Montevideo, y repasaron mecanismos para mitigar tensiones comerciales, entre ellos, el fortalecimiento del comercio en monedas locales, informaron participantes a periodistas al término del encuentro.
En esta asamblea del BID que tiene lugar en la capital uruguaya, donde se encuentra la sede del Mercosur integrado por Brasil, Argentina, Paraguay y Uruguay, varios países de este bloque comercial han reiterado sus claras diferencias de enfoque en materia de comercio exterior.
El viernes, el ministro anfitrión, el uruguayo Fernando Lorenzo, titular de la cartera de Economía, expresó su "preocupación creciente por la evolución de las tentaciones proteccionistas en la región y en el mundo".
Su par argentino, Hernán Lorenzino, manifestó un diagnóstico opuesto. "No hay ni más ni menos que incremento de los flujos comerciales entre nuestros países", señaló el funcionario en el marco de un seminario organizado por la Asociación Latinoamericana de Integración (Aladi), el viernes.
Sectores empresariales y de gobierno de Brasil, Uruguay y Paraguay, han criticado duramente las distintas trabas comerciales dispuestas por el gobierno de Cristina Kirchner, que busca evitar que su excedente comercial -la principal fuente de divisas del país que tiene cortado el acceso a los mercados de deuda tras su moratoria en 2001- se deteriore aún más.
De su lado, México y Perú, junto a Chile y Colombia, han indicado que evalúan demandar a Argentina ante la Organización Mundial de Comercio (OMC) por las restricciones impuestas a sus productos para ingresar a ese país.
También Brasil ha bloqueado el ingreso de algunos productos de sus socios del Mercosur a su territorio, esgrimiendo cláusulas de origen de los materiales de fabricación, contenidas en la reglamentación del bloque.
AFP