Pese a la cancelación de la fiesta del Congreso programada para ayer en Aguapanelas donde se estimaba que asistieran cerca de 600 personas, empleados no quedaron a gusto con la inesperada decisión y tomaron represalias.
Según el secretario de la corporación, Gregorio Eljach dijo que algunos empleados protestaron por la decisión e incluso se sintió agredido y amenazado “Algunos de ellos estaban alicorados, enardecidos y en actitud injuriosa especialmente contra mí. Me gritan insultos personales”.
Eljach declaró que agentes de seguridad del Capitolio tuvieron que acompañarlo al primer piso, también manifestó que envió una carta al presidente del Congreso Juan Fernando Cristo solicitando la investigación de los funcionarios que armaron el desorden y además explicó está dispuesto a enviar el informe a la Fiscalía si es necesario, “yo puse mi informe y control disciplinario tiene que investigar. Yo estoy dispuesto a enviar esto a la Fiscalía si es necesario”.