La Sala Penal del Tribunal Superior de Antioquia confirmó la sentencia de 29 años y 9 meses de prisión, en contra del capitán del Ejército Nacional Jaime Alonso Pinto Colmenares y los soldados voluntarios Carlos Mario Escudero Cano y Dixon Arturo Mena, por el homicidio de dos menores de edad a quienes presentaron como guerrilleros abatidos en combate.
El 23 de marzo de 1997 tropas de la Cuarta Brigada del Ejército reportaron la muerte de dos supuestos milicianos de las Farc de 15 y 17 años de edad, tras una presunta emboscada perpetrada en zona rural del municipio de Urrao (Antioquia). En la acción militar se logró la incautación de un fusil M-16, un revólver y dos granadas de fragmentación.
Los familiares de las víctimas declararon a la Fiscalía que los jóvenes eran campesinos y que fueron retenidos por las tropas oficiales tres días antes de su muerte. Varios testigos presenciales aseguraron además que los militares ingresaron a una finca de la zona de donde hurtaron mercado, utensilios de cocina y seis gallinas.
Peritos del Instituto Nacional de Medicina Legal y Ciencias Forenses determinaron que los disparos que recibieron los menores fueron hechos a muy corta distancia, y el estudio de balística practicado al fusil incautado determinó que el arma no estaba apta para disparar.
Además, el Fiscal de la Unidad Nacional de Derechos Humanos y DIH encargado de la investigación encontró diversas contradicciones en las declaraciones de los condenados sobre la hora del supuesto enfrentamiento y la ropa que usaban las víctimas.
El fallo de primera instancia fue proferido por el Juzgado Primero Penal Adjunto del Circuito Especializado de Antioquia, el 5 de noviembre de 2010.