Víctor G. Ricardo | El Nuevo Siglo
Miércoles, 14 de Octubre de 2015

 

“Que garantice la paz desde las regiones”

PRESENCIA DEL ESTADO

Construir tejido social 

Con  el fin de garantizar condiciones de sostenibilidad dentro de los procesos de reconstrucción social, económica y cultural, resulta fundamental fortalecer el capital social y promover esquemas institucionales (gubernamentales, privados o mixtos) que aseguren la existencia y cumplimiento de unas 'reglas del juego' que hagan posible la articulación de consensos. En este contexto y teniendo presente que la fragilidad de las instituciones encargadas de la provisión de seguridad y justicia fue uno de los factores primordiales que dio origen a la violencia en el país, debe de manera proactiva promoverse la convivencia pacífica y apoyarse el desarrollo de instituciones tales como los mecanismos alternativos de resolución de conflictos, las comisarías de familia, las redes contra violencia intrafamiliar, los centros de paz o casas de justicia, así como los centros de conciliación y mediación de conflictos. Igualmente se hace necesario la promoción y desarrollo de otras instituciones que involucran a la comunidad de manera directa, tales como veedurías tendientes a garantizar el control  sobre el uso de recursos públicos y sobre la continuidad y eficacia de las acciones ejecutadas, además de organizaciones comunitarias de apoyo a gobiernos regionales y locales en la prevención y control del crimen. El énfasis en este campo de acción debería ser el fortalecimiento de organizaciones de base para consolidar la participación, al igual que procurar la vinculación de los diferentes niveles de Gobierno para lograr un fortalecimiento de lo público y lo privado.

Al hacer efectiva la participación de la comunidad y garantizar que ésta se apropie de los beneficios y control social de los proyectos, se fortalecerá nuestra democracia y se construirá el capital social requerido para darle sostenibilidad al proceso de paz, profundizando la descentralización y fortaleciendo la presencia efectiva del Estado en todos los territorios. La eliminación de las causas ultimas del conflicto pasa por el desarrollo de las regiones convocando el sentido de pertenencia de los actores locales, quienes son los llamados a orientar las decisiones en busca de los objetivos comunes de progreso.

Con un modelo semejante podremos  identificar la acciones prioritarias que nos lleven a realizar presencia positiva de Estado teniendo además en cuenta la de actores armados, cultivos ilícitos, niveles de violencia, pobreza, conflicto y realidades nacionales. No cabe duda de que una de las razones del conflicto colombiano ha sido la falta de presencia y acción del Estado en las zonas marginadas. Es hora de que el Estado lidere la construcción del verdadero tejido social que garantice la paz desde las regiones.