ORLANDO CANO VALLEJO | El Nuevo Siglo
Miércoles, 26 de Diciembre de 2012

Lo que viene

 

Viene 2013 cargado de novedades en política, economía, fútbol, relaciones internacionales y la dirigencia empresarial.

La primera prueba reina estará a cargo del fortín tributario que el Congreso de la República le acaba de aprobar al Gobierno. Vamos a ver qué tan real, cierto y objetivo es el alcance del nuevo esquema impositivo, tal vez, lo más cercano a una reforma estructural.

Hora de emprender una transformación productiva a través de instrumentos legales que ya tiene el ejecutivo para fortalecer economía social con equidad y mayores oportunidades a poblaciones vulnerables.

No hay excusas para frenar las locomotoras de la prosperidad económica. Hay nuevo combustible para impulsar tren del desarrollo hasta estaciones de progreso y justicia social.

No quedan pretextos para no llenar de oportunidades laborales vagones del empleo productivo en todas las regiones del país.

La estructura tributaria cobrará mayores tarifas en el nuevo año a los más prósperos y hará balanza con la clase media. Que así sea y que finalmente el nuevo universo de impuestos beneficie a más pobres y focalice sus logros en creación de puestos de trabajo, inversión social, salud, educación y atención a víctimas de la violencia.

El ejecutivo recobra fuerzas financieras para seguir en la construcción de una nación más equitativa e incluyente. Crear empresa y compartir utilidades le va bien al crecimiento económico.

La política, vista desde el balcón del Congreso 2012, se oxigena por su compromiso con iniciativas prioritarias para el país. Menos desgaste, algo de credibilidad y mayor compromiso favorecen a senadores y representantes.

El deporte, con su selección de fútbol de mayores, rumbo a Brasil 2014, pinta lleno de gloria. La falcomanía está de moda y con él el quinto lugar que hoy ocupa el combinado nacional en el ranking mundial de la FIFA.

La cúpula empresarial despide el año con nubarrones en ventas y producción. También por cambios inesperados como en la dirección del conglomerado Carvajal donde Ricardo Obregón Trujillo, líder y visionario, fue reemplazado por Bernardo Quintero, actual encargado de Empaques, línea de esa multinacional.

Vienen reorganizaciones en mando de gremios, de grupos económicos y rotación de presidentes de compañías exportadoras, ligadas al TLC con Estados Unidos.