Misión Pacífico

La  Alianza del Pacífico picó en punta en la carrera económica del año que se inició en medio de aires de renovación proyectados por países  latinoamericanos cansados de la inoperancia de la OEA,  Grupo de Rio, Grupo Andino y Unasur, entre otros.

Detrás de la reunión preparatoria de la Asamblea de los cuatro de la Alianza, prevista para febrero en Cartagena, quedó un ambiente de entendimiento entre los delegados y amplia coincidencia en que las uniones y acuerdos en este momento en el mundo salieron de la teoría a la práctica.

Ratificó el buen recibo que tuvo la instalación formal de la Alianza el año pasado en Cali, y la semblanza que proyectó como unión fresca y sin intereses políticos en la escala continental.

Chile, Perú, Colombia y México están dispuestos a colocarse a la vanguardia industrial, comercial y financiera de Latinoamérica, sin retórica, con resultados para sus habitantes y respeto político a los gobiernos socios.

Así lo explica - a esta columna-  una fuente de primera mano, participante en el encuentro de cancilleres en Ciudad de México.

El reto del Pacifico para Colombia es vitalizar la franja occidental de 1.300 kilómetros sobre esa costa para impulsar desarrollo para todos los estratos socio-económicos, desde Chocó hasta Nariño, incluidas las áreas interiores de Risaralda, Valle y Cauca. 

No puede ser como las viejas uniones de países con marcos teóricos, que se convirtieron en gruesos libracos saturados de proyectos que nunca se cumplieron.

En la Asamblea de febrero el empuje estará dirigido a obras de infraestructura, generadoras de desarrollo, empleo productivo y verdadero apoyo a pequeña y mediana empresa en cada país.

No se quiere fusión de empresas, que en algunos casos culminan con estallidos en inversión de capital y golpes al empleo, consecuencia de concentración y monopolios.

Si toman vuelo los cuatro gobiernos y sus  gremios empresariales se abrirá  futuro  en producción y exportación entre aliados, libre de aranceles desde este año.

Es, al menos, mejor que lo intentado por el Pacto Andino, en la década de los 70,  cuando se pretendió unificar entre sus países, normas laborales y comerciales  con madeja burocrática que llevó el sistema al fracasó.

La Alianza del Pacifico ojalá sea para Colombia un despertar económico y social de poblaciones en el olvido, pese a tener a Buenaventura, el puerto más importante en la zona occidental.

Ese objetivo prioritario amerita crear una Misión Pacífico, en vivienda, salud, educación y empleo productivo.  Sería un oportuno rescate de más 15 millones de personas, en pobreza y miseria,- según cálculos de expertos de organismos públicos y privados.