JUAN ÁLVARO CASTELLANOS | El Nuevo Siglo
Jueves, 12 de Diciembre de 2013

Los pensionados

 

Es  el momento para emprender una política integral de economía social sin marginamiento, ni discriminación por sexo, raza o edad. Con tendencia alcista en los  indicadores de inversión nacional y extranjera, producción, finanzas, comercio y servicios del país al terminar 2013, no puede esconderse a unos sectores de población y mostrar a otros, como parte del  triunfo en generación de empleo, reducción de inflación y mejora en calidad de vida. Que sea cara buena para todos. Si mejora el indicador de desarrollo humano con equidad, de manera preferencial se debe señalar que esas buenas condiciones benefician a amplios sectores de población    

El Gobierno tiene el reto de aplicar un giro de fondo, no solo con el incremento del salario básico por Ley, sino también, definir un esquema de reajuste justo y equilibrado en pensiones del millón 200 mil personas cubiertas por el sistema. Hizo carrera de manera inexplicable que, cuando se fija incremento salarial por decreto de Gobierno o decisión de la Mesa de Concertación Laboral, las pensiones quedan de lado. El reajuste que se hace por aparte, se convierte en un súper mínimo, siempre por debajo del alza en salarios, cuando debería ser de igual proporción.   

Tampoco debe descartarse ofrecimiento de trabajo parcial a pensionados, de todas las edades  en plenitud de salud física y mental, sin  afectar sus mesadas, o quitarles espacio a quienes están en la edad laboral. Países desarrollados tienen esa modalidad para integrar personas de 50 a 60 años. Médicos, ingenieros, profesores y administradores, hacen esa  asistencia en sitios públicos, en eventos culturales, educativos y recreacionales, al igual que en certámenes de  alta concentración. Es una fuerza de apoyo social con reconocimiento económico  en Inglaterra, Francia, Alemania, Canadá y algunas ciudades de Estados Unidos.  Hay jornadas de 4 a 5 horas semanales, como guías de protección e información, en coliseos, salas teatrales y musicales.

Otros tienen igual número de horas, en prevención, revisión de infraestructura, acueductos, energía, edificaciones y parques. Alertan sobre los daños locativos y demás, según sea necesario. Eso es educación y cultura ciudadana.

Teletrabajo y digitación informativa, sobre tránsito y transporte en pantallas públicas de zonas urbanas y carreteras, es una fuente laboral en países desarrollados. Los recursos de sostenimiento y pago, son canalizados por vías tributarias y recursos de destinación estatal. Por ejemplo, en el país, ante la eventualidad de paz, esos guías sociales prestarían eficiente servicio a la ciudadanía en los planes asistenciales previstos. Serian además complementos económicos para pensionados, una fuerza laboral desaprovechada, con experiencia y en olvido.