ARRECIFES
¿Cuál Democracia?
LOS más caracterizados voceros de la ultraderecha religiosa nacional, el senador Álvaro Uribe Vélez y el Procurador General de la Nación han salido a señalar al Presidente Santos de atentar contra la democracia por haber suscrito un acuerdo con las Farc en el que determinan darle al pacto de paz la precisión y alcance de un “Acuerdo Especial en los términos del artículo 3 común a las convenciones de Ginebra de 1949” que supuestamente ingresará como artículo transitorio a formar parte de la Constitución.
Otros voceros del mismo espectro ideológico aunque más al centro, como los Pastrana, se han sumado al mismo coro. Y todos a una, a pesar de ser tan religiosos, olvidan la pregunta Bíblica de Lucas que define la hipocresía: “¿Por qué miras la paja en el ojo de tu hermano, no reparando en la viga que tienes en el tuyo?”
El senador Uribe que tiene los ojos llenos de vigas antidemocráticas, tiene flaca memoria. ¿Acaso no recuerda todo el desbarajuste institucional que originó la introducción del “articulito” para su reelección? ¿O los términos de la sentencia de la Sala Penal de la Corte Suprema cuando condenó a la Representante a la Cámara que vendió su voto para el efecto?
Cuántas violaciones flagrantes de la Constitución se pueden contabilizar en cabeza del Procurador cada vez que pone por delante de su misión institucional su fanatismo religioso. Cuántas veces la Corte Constitucional ha tenido que llamarle la atención por sus maniobras para evadir el cumplimiento de sentencias sobre los derechos abortivos de las mujeres o sobre los de las parejas del mismo sexo. Un Procurador militante por razones religiosas en contra de los derechos de las mujeres o de los de las parejas del mismo sexo o de los de cualquier minoría es más desestabilizante de la democracia que un frente guerrillero aislado en la mitad de la serranía del Perijá.
Y la casa Pastrana, la misma que aún hoy no ha entregado ninguna explicación sobre el Pacto de Chicoral, peor para la historia de violencia de Colombia que el Pacto de Chibolo, o la misma que le debe una presidencia a una conveniente foto del máximo jefe de las Farc con su Comisionado, ¿de qué democracia habla?
¿Cuál es la democracia que ellos defienden y que se vería afectada por un tratado de paz con las Farc? ¿Una que le permita a los hijos del Presidente de la República enriquecerse durante sus mandatos o perseguir a las Cortes y a los periodistas de oposición mediante acciones violatorias de la Constitución y la Ley? ¿O tal vez una donde las mujeres no tengan ningún derecho sobre sus cuerpos. Donde, como ocurría antes de la Ley 28 de 1932, no tengan capacidad de disposición no ya sobre sí mismas, sino ni siquiera sobre sus bienes? O tal vez, quieren una donde los campesinos no tengan derecho a tener ni un centímetro de tierra propia.
Harían bien en decirnos de frente y sin ambages, qué es lo que entienden por democracia, así por lo menos sabremos qué es lo que están defendiendo cuando atacan la paz.
@Quinternatte