"Hay suficiente en el mundo para cubrir las necesidades de todos los hombres, pero no para satisfacer su codicia". Mahatma Gandhi.
EL nivel de contagio del Covid-19 en el Amazonas ha crecido de forma exponencial convirtiéndolo en el departamento con mayor índice de afectados acorde a la población. Hay más de 230 casos positivos en una población de 75 mil habitantes, donde la mayoría es población indígena, que es la guardiana y protectora del pulmón del mundo.
Es preocupante la situación en una región totalmente aislada del interior del país, donde no hay capacidad hospitalaria, ni suficiente personal sanitario y donde no tienen los elementos de bioseguridad indispensables para atender a la población.
Es tan dramática la situación que el personal médico y sanitario del hospital público departamental, hoy intervenido, renunció masivamente el pasado 20 de abril, para no hacerse responsable de una tragedia anunciada y menos para exponer sus vidas ante la falta de elementos , haciendo más critica la precaria situación de salud en el departamento.
La fundación Gaia Amazonas hizo una fuerte advertencia al Gobierno nacional donde señalan: “I- El alto riesgo de desaparición física y cultural en que se encuentran los pueblos, tal como lo ha expresado la Corte Constitucional; II- la necesidad de adecuar las medidas nacionales, para que tengan pertinencia en el contexto amazónico y III la afirmación categórica respecto que:…la institucionalidad de salud occidental se encuentra en precarias condiciones para atender la actual emergencia…”.
El Gobierno debe coordinar el plan de contingencia para el Amazonas de la mano de los pueblos indígenas quienes ejercen autoridad en el 83% de la jurisdicción del departamento. 76 camas disponibles en Leticia no son suficientes para lo que se avecina, la población a lo único que puede recurrir es a la sabiduría ancestral y medicina indígena, ante la incapacidad del Gobierno.
También se pronunció la Iglesia Católica ante la preocupante situación: “Aunque todo el país está amenazado por esta pandemia, no todos estamos en las mismas condiciones para responder a ella. Las desigualdades sociales visibles dejan desprotegidos a los más débiles y vulnerables. Nos asiste una especial preocupación por la situación de las personas en la cárcel de Villavicencio y de los habitantes del puerto de Leticia”
Las cifras de contagiados en la amazonia brasileña supera los 3.800, de los cuales se han registrado más de 350 muertos; en la amazonia peruana más de 80 muertos, lo que indica que esto se trata de un ‘etnocidio’. Los gobiernos de Brasil, Colombia, Perú y Ecuador no les están dando la importancia a los habitantes de la Amazonía, los están dejando morir, tal vez con la intención de convertir el Amazonas en un gran potrero para ganadería.
El Covid-19 y el presidente Jair Bolsonaro, del Brasil, son la real y gran amenaza de la población indígena, de la fauna y la flora de la región amazónica.
Unámonos para salvar la única esperanza verde que nos queda en el mundo: el Amazonas.