El “Oso ruso” | El Nuevo Siglo
Viernes, 8 de Abril de 2022

El “Oso ruso”, como se le conoce dentro del imaginario a Rusia, representa entre otras cosas al mito del siglo XVI, sobre que estos animales abandonaban los bosques durante el invierno para dirigirse a las casas en búsqueda de comida, lo cual generaba que las familias abandonaran sus hogares por el horror y fallecieran luego por el frío. De hecho, el partido político del terrible, despiadado y peligroso Vladimir Putin utiliza un oso como imagen. “Rusia Unida”, bajo ese nombre el nuevo tirano tomó el poder de la nación que antes había sido gobernada también por un monstruo: Stalin. 

No es la primera vez que Rusia hace estragos. Las violaciones masivas que perpetuaron los soldados y oficiales rusos a mujeres y niñas alemanas tienen un lugar oscuro en la historia contemporánea. Hay quienes calculan que los soviéticos pudieron haber abusado sexualmente de hasta 2 millones de mujeres y niñas alemanas, dentro de esas cifras también niños fueron abusados y en muchos casos asesinados. Además, en buena parte de los casos hubo “violación masiva” en donde la víctima era violada por el mismo o diferentes hombres hasta 70 veces o hasta que diera su último suspiro, e incluso hasta después de eso.

Por ejemplo, de la cifra estimada de mujeres violadas solo en Berlín, luego de la caída del Reich, por lo menos 100 mil mujeres fueron abusadas, de esa cifra, 10 mil asesinadas a causa de esa transgresión. Así es que un 10% de las víctimas no resistió a este vejamen, que más que placer físico, daba al perpetrador una satisfacción perversa como si de un trofeo se tratara. La humillación, la ira, el miedo, la prepotencia, el asco, entre otras tantas cosas, es lo que aquellas mujeres, niñas y niños sintieron. Así hubieran sobrevivido a tan horrible hecho, deshumano, así como despiadado, una parte de su vida murió en aquel siniestro.

La corresponsal de guerra rusa Natalya Gesse afirmó que el Ejército Rojo era un “ejército de violadores” que accedía carnalmente a niñas desde los 8 años hasta mujeres de 80. Para el profesor Alexander Statiev, los soviéticos encontraron en la agresión a los civiles su festejo de victoria.

La violencia nutría su ego de vencedores, así que, entre más despiadados fueran, más victoriosos se sentirían. Y, tomar a las mujeres y a las niñas, siendo las más frágiles y desprotegidas de la historia, demuestra en sí un gran nivel de cobardía y de deshumanización. Aunque no solo fueron los soviéticos los únicos ni los primeros que se aprovecharon de las mujeres y de los niños, sino que otras tropas hicieron lo mismo, y la historia conduce a episodios muy similares en otros tiempos, pero, los soviéticos fueron y son de los más despiadados. Las violaciones masivas o grupales les identifican en su accionar de guerra, así como las torturas. 

Los historiadores alemanes de la Segunda Guerra Mundial, Theodor Schieder y Hans Rothfel, documentaron los testimonios de las mujeres víctimas del ejército soviético en 1953 bajo el nombre de “Documentación sobre la expulsión de los alemanes de Europa central y oriental” (Documentation of the Expulsion of Germans from East‐Central Europe). Allí, Anna Schwartz, una de las víctimas, arguyó que “la ocupación soviética de Europa oriental comenzó, literal y simbólicamente, con la ocupación por la fuerza de los cuerpos de las mujeres alemanas”.

También quedó grabado para la memoria en esta recopilación escrita que las imágenes visuales y el trasfondo sexual también estaban presentes allí, ya que las mujeres alemanas llevaban las cicatrices de las violaciones de los soldados del Ejército Rojo como heridas de guerra. De hecho, el consenso general de las mujeres entrevistadas se centró en cómo, una vez que llegaron los rusos, “ninguna mujer o niña estaba a salvo de los liberadores”.

@rosenthaaldavid