Para el activismo “LGTB”
A raíz del fallo de la Corte Constitucional que le dio viabilidad legal a la adopción por parte de una pareja de lesbianas del hijo biológico de una de ellas, el “activismo” LGTB ha vuelto a colocar en la agenda pública argumentos tales como que “el 10% de la población mundial es homosexual” o que “para adoptar la orientación sexual no puede ser obstáculo pues lo que se requiere es salud, madurez y estabilidad emocional…”.
Pues bien, hay malas noticias para esos argumentos provenientes del último “National Health Interview Survey” de EE.UU, importante informe federal que por primera vez incluyó una pregunta sobre la orientación sexual. Allí se evidencia que solo un 2,3% de la población declara ser gay, lesbiana o bisexual; resultados estos que han decepcionado a los activistas gais, quienes durante años habían pedido que se incluyera esta pregunta en el informe.
Dicho estudio, que encuestó a 35.000 adultos en 2013 -en entrevistas personales en las casas de la gente- , encontró que el 96,6% de los interrogados se declararon heterosexuales; el 1,6% se identificaran como gais o lesbianas; el 0,7% como bisexuales; y otro 1,1% respondieron que “otra cosa” o no contestaron. Los pocos informes académicos que habían tratado antes de medir la población LGTB habían estimado que estaba entre el 3,5% y el 4%, proporción que crecía si la pregunta no se refería directamente a su identidad sexual sino a sus atracciones y experiencias sexuales.
Así pues, la cifra del 2,3% contrasta con lo que la opinión pública ha asumido sobre la proporción de homosexuales en el conjunto de la población. Muchos, como se dijo al comienzo, creen que está en torno del 10%, una cifra mítica popularizada en los años 60 a raíz del informe Kinsey. Pero encuestas Gallup han mostrado que una mayoría de americanos cree que la proporción es aún mayor, cercana al 25%. Según Jeff Johnston, analista de Focus on the Family, “el americano medio cree que el porcentaje (de LGTB) es mucho mayor, probablemente porque los medios de comunicación y de entretenimiento y otras fuentes influyentes han concedido una gran relevancia a la homosexualidad en los últimos años”.
Pero no solo son malas las noticias respecto a proporción de la población, también en cuanto a indicadores de salud y madurez pues el informe observa que los problemas relacionados con el tabaco, el alcohol o los trastornos psíquicos son mayores entre la población de gais, lesbianas y bisexuales. Entre los adultos (18-64 años), los fumadores son el 27,2% entre los gais y lesbianas, y el 29,5% entre los bisexuales, frente a un 19,6% entre los heterosexuales. Los problemas por el consumo excesivo de alcohol en algún momento del último año afectan al 35,1% de gais y lesbianas, al 41,5% de los bisexuales, frente al 26% de los heterosexuales. El 11% de los bisexuales declaraban haber sufrido problemas psíquicos importantes en el último mes, frente al 3,9% de los heterosexuales.