Afloran nuevos poetas y escritores | El Nuevo Siglo
Viernes, 2 de Septiembre de 2022

En ocasiones pienso que el premio de quienes escribimos duerme, tímido y virginal, en el confuso corazón del lector más lejano.

Camilo José Cela

LLEGARON a mis manos excelentes producciones literarias que demuestran que los colombianos seguimos cultivando las letras y produciendo novelas, cuentos, poemas y composiciones, que ya van ganando un espacio en el mundo literario universal.

Hay una gran poetisa barranquillera, que escribe y describe con finas palabras el amor, el desamor, las alegrías, las tristezas y las pasiones. Tiene gran entereza de carácter y de amor por la vida. Es Clarisa Heilbron, hija de Andrés Heilbron y Gloria Buelvas. Tiene tres hermanas: Gloria, Ileana y Hedeyanira.

Ella misma se describe así: “Y no por ser una reina de belleza, pero he aprendido a Amarme tanto que Amo hasta mis pies torcidos y mi lento andar”.

De ella este fragmento de poema:

“Tengo mi vida tan vacía, que ya no sé sonreír, se me ha olvidado sonreír.

Durante mucho tiempo se fue mi sonrisa, con tantas cosas que los recuerdos duelen, tantas cosas sin un porqué para sonreír.

Mis lágrimas están, pero estas lágrimas son mías, no me verán llorar.

Mi dolor está escondido, tantas angustias, solo tengo silencios

ocultando sufrimientos, sufrimiento solo mío, por culpa mía”.

Tiene más de mil poemas que serán publicados muy pronto, y seguramente anclarán en la vena poética de los colombianos y por qué no, de los hispanoamericanos.

“Porque la Luna no sale en la ciudad? Este es un gran libro, de un gran cuentista santandereano, Wilson Raúl Carreño Velasco, ingeniero de Petróleos de la Universidad Industrial de Santander, emprendedor, conferencista, narrador oral y socio fundador de la fundación UIS Solidaria, quien ha sabido perforar la imaginación para encontrar en lo más profundo del ser historias que, narradas en forma sencilla, transportan al lector o al oyente hacia un fascinante mundo de reflexiones y vivencias.

Un fragmento del cuento “EL Péndulo”: “El péndulo se mueve de derecha a izquierda y de izquierda a derecha. La idea del tratamiento de hipnosis es recordar. Él quiere olvidar.

Es tarde, muy tarde. A la izquierda, está el río y a la derecha un barrio peligroso, porque en la romántica París, también hay barrios peligrosos”.

La joven escritora colombiana residente en Buenos Aires, Laura Restrepo Guzmán, se lució con el cuento “Mangos” y se alzó con el Premio Iberoamericano de Cuento Julio Cortázar otorgado en La Habana por un jurado conformado por el argentino Oliverio Coelho y los cubanos María Elena Llana y Abel Prieto, quienes consideraron que en su obra la autora expuso “de modo magistral la violencia y crueldad que marcan trágicamente el área”.

En el premio participaron autores de 28 naciones, quienes presentaron un total de mil 98 cuentos y narraciones con alta calidad literaria.

Con el premio se rinde tributo al afamado escritor argentino y que llega ahora a su vigésima edición.

lorenarubianof@gmail.com