Coalición de gobierno salvada tras acuerdo en Portugal | El Nuevo Siglo
Jueves, 4 de Julio de 2013

El primer ministro portugués anunció el jueves que se encontró una "fórmula" que garantiza la supervivencia de la coalición de centro-derecha que gobierna el país, desestabilizada por una crisis política que preocupa a los mercados y a los socios de ese país bajo asistencia financiera.

"Se encontró una fórmula que permitirá garantizar la estabilidad del gobierno", declaró Passos Coelho después de entrevistarse con el presidente, Anibal Cavaco Silva.

El primer ministro no dio detalles sobre esta "formula", indicando que las discusiones seguían en curso para precisar el contenido.

El jefe de Estado se reunirá el lunes con los partidos políticos de extrema izquierda, después de haberse entrevistado el miércoles con el socialista Antonio José Seguro, líder del principal partido de la oposición, que pide elecciones legislativas anticipadas.

Tras el pedido de Bruselas de que se "aclare" cuanto antes la situación política y la reacción de los mercados, el primer ministro de centro-derecha, Pedro Passos Coelho levó a cabo desde el miércoles intensas negociaciones con el ministro de Relaciones Exteriores Paulo Portas, cuya dimisión desencadenó una grave crisis política.

Portas dirige también el Partido Conservador CDS-PP, socio minoritario de la coalición que dirige el Partido Socialdemócrata (PSD, centro derecha), cuyo apoyo es necesario para que la coalición conserve la mayoría en el Parlamento.

Passos Coelho se negó a aceptar la renuncia de Portas, que siguió a la del ministro de Finanzas, Vitor Gaspar, principal garante de la aplicación estricta del programa de austeridad que Portugal se ha comprometido a llevar a cabo a cambio de una ayuda financiera de 78.000 millones de euros concedida en mayo de 2011.

La renuncia de Portas "responde a una decisión personal y no pone en duda el apoyo del CDS-PP al gobierno", afirmó el jueves el primer ministro.

El ministro alemán de Finanzas, Wolfgang Schäuble, estimó que la crisis política en Portugal tendrá un impacto limitado.

"Creo que el euro es nuevamente visto en los mercados como una moneda suficientemente estable para que la situación política en un sólo país (...) no signifique una crisis para la estabilidad del euro", afirmó.

Por su parte, el presidente del Banco Central Europeo (BCE), Mario Draghi, declaró que "Portugal está en buenas manos" con la nueva ministra de Finanzas, María Luis Albuquerque, antigua secretaria del Tesoro con Gaspar.

Evitar elecciones anticipadas

El país ha obtenido hasta ahora "resultados notables, incluso excepcionales", dijo el jefe del BCE, una de las instituciones que junto con la Unión Europea y el Fondo Monetario Internacional (FMI), integran la denominada troika de acreedores.

Passos Coelho, preocupado con mantener buena imagen ante sus acreedores aseguró el jueves que pondrá todo en obra para que "el gobierno continúe con su trabajo".

"La perspectiva de elecciones anticipadas es tan aterradora para el PSD que el primer ministro hará todo para salvar la coalición", dijo a la AFP Antonio Costa Pinto, politólogo de la Universidad de Lisboa.

Optimista frente a los esfuerzos de los dirigentes portugueses, la Bolsa de Lisboa ganó casi un 4% tras caer la víspera 5,31%. Por su parte, el rendimiento que pagan los bonos de deuda portuguesa a 10 años, se distendían al final de la sesión después de haber subido por encima del 8% la víspera.

Aunque Passos Coelho logra evitar las elecciones anticipadas que reclama la oposición socialista, "la coalición saldrá debilitada y le costará aplicar las medidas que le exige la troika", advirtió el politólogo Antonio Costa Pinto.

Los acreedores tienen previsto iniciar el 15 de julio un nuevo examen del plan de ayuda a Portugal, cuyo principal punto sera la reforma del Estado para recortar 4.700 millones de euros más en los gastos públicos, lo que tenía que hacer precisamente Portas.

Pese a los recortes presupuestarios y las subidas de impuestos sin precedentes, la deuda pública de Portugal representa ya el 120% del PIB y el déficit era del 10,6% a finales de marzo, casi el doble de la meta del 5,5% prevista por Lisboa, en medio de una recesión económica y un desempleo galopante.

AFP.