Un relator de la ONU defendió este jueves el boicot a empresas ligadas a las colonias israelíes en Cisjordania en razón del carácter ilegal de esos asentamientos.

En un informe a la Asamblea General de la ONU, Richard Falk, relator especial sobre la situación de los derechos humanos en los territorios palestinos ocupados, "considera que todas las empresas que operan en las colonias de repoblamiento israelíes o tratan con ellas (..) deberían ser boicoteadas hasta que sus actividades sean plenamente conformes a las normas y las prácticas del derecho internacional humanitario".

Falk pide a la "la sociedad civil" de cada país el desarrollo de "fuertes campañas de boicot, desinversión y sanciones" contra estas compañías.

Varias de esas firmas son citadas en el informe, entre ellas las estadounidenses Motorola, Caterpillar y Hewlett Packard, el grupo bancario Dexia y la francesa Veolia Environnement.

En conferencia de prensa, el relator justificó su inhabitual llamado por el hecho que el estado hebreo "continúa desafiando" las decisiones de la ONU que denuncian su política de colonización, "violatoria de las leyes internacionales humanitarias". De esa violación son cómplices las compañías mencionadas, señaló.

Falk explicó que puso el acento en la responsabilidad de las empresas en parte por la "frustración" que le provocó "el fracaso de los esfuerzos de la ONU". "Existe la sensación de que lo que la ONU diga no cuenta", destacó, al tiempo que reconoció que su llamado "constituye una innovación".

La colonización, declaró también el funcionario de Naciones Unidas, "pone gravemente en peligro" la creación de un estado plaestino viable. "Cuanto más se postergue ese proceso, menos realista será pensar que una colonia israelí pueda ser evacuada con el fin de crear un estado palestino viable", dijo.

Altos funcionarios israelíes y estadounidenses criticaron el llamado de Falk, calificado por la embajadaora de Washington ante la ONU Susan Rice como "irresponsable e inaceptable".

AFP