El jefe de una de las facciones remanentes de la guerrilla Sendero Luminoso, Florindo Flores alias 'camarada Artemio', fue capturado este domingo "muy malherido" en la selva norte de Perú, informó el ministro de Defensa Alberto Otárola.

 

Florindo Flores fue hallado herido de bala por una patrulla del ejército en una cabaña en la selva del Alto Huallaga (noreste), en la que se refugió después de escapar el jueves a un enfrentamiento con la policía.

 

"Está vivo, se le están dando las atenciones médicas correspondientes. Está vivo, está muy malherido, tiene el brazo derecho prácticamente perdido", dijo Otárola al canal local N.

 

Diversos medios de prensa indicaron en sus ediciones electrónicas que 'Artemio' estaba con suero en una cabaña a orillas del río Mishollo al momento de ser encontrado.

 

Las patrullas trasladaron al 'camarada Artemio', de 47 años, a la base policial de Santa Lucía, en Tocache (noreste), adonde viajó esta mañana el presidente Ollanta Humala, un ex teniente coronel del ejército que luchó contra las guerrillas en la década de 1990 en la zona donde operaba 'Artemio'.

 

En un breve encuentro en la enfermería de la base, Humala pidió al 'Camarada Artemio' y a sus seguidores que depongan las armas y le aseguró que el proceso judicial en su contra se hará con pleno respeto de sus derechos, según la agencia Andina.

 

"Hemos logrado un hecho histórico. Hemos derrotado a los delincuentes terroristas capturando con vida a 'Artemio', que se encuentra bajo tratamiento médico", dijo Humala en una declaración a la televisora estatal desde esa base.

 

'Artemio' llegó por la tarde al aeropuerto militar de Lima a bordo de un avión Antonov. El guerrillero fue bajado de la aeronave en una camilla y llevado a una ambulancia, que lo condujo al hospital central de la policía, según imágenes captadas por una televisora local.

 

El camarada 'Artemio' es, según los analistas, el último integrante en libertad del Comité Histórico de Sendero Luminoso, por quien el gobierno peruano ofrecía una recompensa de un millón de soles (350.000 dólares) y el gobierno estadounidense 5 millones de dólares.

 

"Con esto empieza realmente la pacificación en el Alto Huallaga", acotó el presidente peruano al graficar la importancia del caso.

 

"De estar vivo, sería tratado de acuerdo a lo que la ley estipula", dijo en tanto el ministro de Justicia, Juan Jiménez, en medio de una inicial confusión respecto al estado del 'camarada Artemio'.

 

La excandidata presidencial Keiko Fujimori felicitó en su cuenta de Twitter "a todos los que hicieron posible la captura de Artemio".

 

Por su parte, el fiscal de la Nación, José Antonio Peláez Bardales, afirmó que según la actual legislación, le espera una pena de cadena perpetua por los delitos que constan en su historial.

 

La caída de 'Artemio' representa la más importante victoria del gobierno de Humala sobre la guerrilla desde que el mandatario nacionalista asumió el poder en julio de 2011, tras ganar las elecciones presidenciales de ese año.

 

'Artemio' había dicho durante una entrevista en diciembre a un medio local que la rama de su guerrilla había sido derrotada, por lo que ya no lanzarían más ataques.

 

Incluso, abogó en esa ocasión por una negociación con el Estado para deponer las armas, siguiendo la línea oficial dictada por el líder histórico de Sendero Luminoso, Abimael Guzmán, en prisión tras su captura en 1992.

 

Actualmente, Sendero Luminoso tiene remanentes en las dos principales zonas cocaleras del país, el Alto Huallaga y el Valle de los ríos Apurímac y Ene, con un total de unos 300 hombres, según analistas.

 

La facción más agresiva de Sendero Luminoso es la del valle Apurímac-Ene (sudeste), donde los choques con las fuerzas de seguridad dejan entre 20 y 30 muertos por año. Esta facción es incluso hostil a la de 'Artemio', rechazando todo tipo de tregua o diálogo con el Estado.

 

Sendero Luminoso, una de las guerrillas más sanguinarias de América Latina, a menudo comparada con el Jemeres Rojos de Camboya, fue desarticulada a mediados de los 90, y sus principales líderes purgan prisión tras un conflicto interno que dejó unos 70.000 muertos, según la Comisión de la Verdad y Reconciliación.

 

La captura en 1992 de Abimael Guzmán marcó el punto de declive de Sendero Luminoso, pero sus remanentes han subsistido en alianza con el narcotráfico, según el gobierno.

 

AFP