El boxeo nacional le brindó las primeras alegrías deportivas a Colombia, pero poco a poco la actividad se fue en picada y hoy pasa por un mal momento,  dado a que no hay un campeón o buen representante que saque la cara por los nuestros a nivel internacional.

Si bien existen varios deportistas criollos destacados, ninguno de ellos se ha hecho a una reluciente carrera y es considerado un peligro para destronar de un título a los actuales campeones, entre los cuales existen dos latinos: el argentino Sergio Martínez en Peso Medio; y el mexicano Saúl Álvarez en Superwelter.

Los primeros inicios del deporte en Colombia, o los primeros registros por allá en 1874 existen cuando unos jornaleros empezaron a entrenar en un improvisado gimnasio montado en una hacienda, en  lo que sería hoy el departamento de Bolívar.

Desde esa época la actividad empezó a crecer, pero fue 24 años después cuando tomó fuerza. En el año 1898, Andrés Gómez Hoyos, padre de la actividad en Colombia, abrió en la universidad de Cartagena  un espacio para la actividad de esta práctica, pero por la guerra de los mil días el claustro cerró de manera indefinida retrasando su crecimiento.

Ya para 1903 se terminó la guerra, y el boxeo nacional regresó de manera paulatina haciendo que en la década de los 20 tuviera su lugar con tres hechos históricos: la realización de la primera velada de boxeo profesional en Colombia; la apertura de un moderno gimnasio en Cartagena; y la creación y organización de la Federación de Boxeo de Colombia.

De allí en adelante la actividad interesó a los colombianos y al poco tiempo comenzaron a darse acontecimientos de manera organizada y reiterativa, lo que facilitó su práctica a nivel profesional.

En esa época se presentaron importantes estrellas como Rafael Espinosa, Víctor Semprún, Luis Duffó, Lorenzo Jiménez, Modesto Morales y el ligero barranquillero Fernando Fiorillo, quien fue el primer criollo en luchar en el exterior, exactamente en Nueva York, donde perdió su pelea frente a Tommy Grogan, por decisión técnica. Sin embargo fue hasta 1972 cuando gozamos de lo mejor que nos pudo brindar esos años de entrenamientos.

Exactamente el 28 de octubre de 1972, Antonio Cervantes Reyes, más conocido como Kid Pambelé, le dio el primer triunfo al país a nivel mundial, al noquear en diez asaltos a Alfonso "Pepermint" Frazer, lo que lo convirtió inmediatamente en héroe nacional.

En diez ocasiones, en un lapso de tres años, defendió Pambelé con éxito su título orbital conseguido en 1972, pero el 6 de marzo de 1976 lo perdió ante el puertorriqueño Wilfred Benítez por decisión dividida de los jueces en quince asaltos. Benítez, de 17 años, se convirtió en el campeón mundial más joven de la historia, marca que no ha sido superada.

Pero un año después Pambelé recuperó el cinturón de los Welter junior  al derrotar por nocaut en cinco asaltos al argentino Carlos María Giménez, ya que Benítez se negó a defender su título contra el mismo al que se lo había quitado. Luego perdió  definitivamente el título al caer noqueado por Aaron Pryor en Cincinnati, el 2 de agosto de 1980.

Sin embargo en 1974 Rodrigo Valdés, en peso medio, consiguió el título para Colombia, ratificando la buena condición en la que los criollos estaban. Luego perdió su corona e igual que Pambelé la recuperó tres años después en 1977.

De allí hacia delante el país vivió una época dorada y tuvo varios campeones de manera consecutiva, entre los que destacaron Ricardo Cardona en  Supergallo en 1978 en la Asociación Mundial de Boxeo (AMB); Prudencio Cardona en 1982 en la categoría Mosca del Consejo Mundial de Boxeo (CMB); en 1985 Miguel Lora Escudero en peso  Gallo de la CMB; en 1987 Fidel Bassa en Mosca por la AMB; en 1988 Tomás Molinares en  Welter en la AMB; y cerrando los 80, Elvis Álvarez en Mosca en la Organización Mundial de Boxeo y Juan Polo Pérez en  Supermosca  de la Federación Internacional de Boxeo; estas últimas dos organizaciones calificadas como las menos reconocidas entre las cuatro que hay.

De allí hacia delante el país también triunfó con muchos otros púgiles, siendo el último el de Yonnhy Pérez en Gallo de la FIB porque lo hecho por Likar Ramos en Superpluma fue de manera interina, y el más reciente, de  Alexánder ‘Cachaco’ Brand el pasado siete de agosto, también fue de manera interina, por lo que él no es el campeón vigente para la CMB sino el camerunés Sakio Bika.

Así que Colombia ya lleva cinco años de sequía de títulos y sin ningún prospecto al frente para resarcir la gloria nacional y llevar de nuevo a la cúspide este deporte en el que el país, al parecer, fue grande.