Asonada en El Mango, alerta temprana para el Estado | El Nuevo Siglo
Miércoles, 24 de Junio de 2015

De la forma en que el Estado reaccione frente a la asonada que en el corregimiento de El Mango, zona rural de Argelia, departamento del  Cauca,  terminó demoliendo la estación de la Policía bajo la excusa de que ésta  ponía a la población en riesgo de un ataque de las Farc, dependerá mucha de la estrategia  militar a aplicar en el que es sin duda el departamento de orden público más crítico.

Si bien no es la primera vez que las instituciones se enfrentan a esta clase de desafío, en donde la ciudadanía pide sacar de los cascos urbanos las estaciones policiales, es evidente que los hechos de orden público de los últimos dos meses en Cauca crean un escenario muy delicado pues es allí en donde las Farc han concentrado la mayoría de acciones terroristas y militares, tras el rompimiento de su tregua unilateral el mes pasado.

 

Se recuerda que años atrás fue la propia guerrilla del ELN la que llegó a plantear que la ubicación de las estaciones policiales en centros urbanos violaba el Derecho Internacional Humanitario y que, por lo tanto, estas debían ser reubicadas en las zonas perimetrales, como es propio de un país con un conflicto armado interno declarado.

Sin embargo, sendas fallos del Consejo de Estado han reiterado que en modo alguno la ubicación de las estaciones en los municipios viola el DIH y que, por el contrario, dejar inerme y sin defensa a la ciudadanía, al retirar las sedes policiales y militares, si constituye una falta del Estado al deber constitucional de proteger la vida, honra y bienes de los ciudadanos.

También se recuerda que fue en el Cauca en donde la asonada protagonizada por indígenas trató de desterrar la base militar ubicada en el cerro Las Torres, en Toribío. El país aún recuerda las imágenes de un sargento que llorando fue arrastrado por los indígenas y expulsado de la base, bajo la tesis del resguardo de que en su territorio  no podían existir Fuerzas Armadas, ni de los grupos ilegales porque ellos eran un territorio neutral y de paz y con una autonomía derivada de los mandatos constitucionales.

Más allá de indignación nacional por el hecho, lo cierto es que la base se reinstaló y el mensaje que el Estado envió es que no hay ni un centímetro del territorio colombiano vedado a la presencia de la Fuerza Pública.

Aunque ayer mismo el director dela Policía y el Gobierno no solo condenaron los hechos  de El Mango, sino que advirtieron que habrá judicialización de los responsables de la destrucción del cuartel, el que se hubiera presentado tal asonada genera una alerta temprana sobre el riesgo de que en otros municipios y corregimientos del Cauca la ciudadanía, por temor a ser blanco de los ataques subversivos o porque está siendo presionada por la misma guerrilla, también actúe en la misma dirección.

Incluso fuentes militares indicaron que se está investigando  si lo que pasó en El Mango es un caso aislado o hace parte de la escalada de acciones guerrilleras con las que las Farc pretende demostrar capacidad de desestabilización y presionar en La Habana un cese al fuego bilateral.

El director de la Policía Nacional, general Rodolfo Palomino se refirió a los hechos de agresión y dijo que la institución no se amedrenta.

“Son acciones, que indudablemente, están siendo amenazadas por la misma comunidad, no desconocemos que hubo intentos de diverso orden desde tutelas y acciones populares orientadas a sacar a la Policía de ese casco urbano, sabemos que la intención es impedir y evitar que la Policía cumpla su función no solo de proteger la comunidad sino de evitar que este corregimiento sea utilizado como corredor de movilidad de las Farc”. 

A renglón seguido sostuvo que “lo que ayer ocurrió es un hecho lamentable, nuestros policías toman la decisión de movilizarse hacia la cabecera municipal de Argelia, hubo una agresión por las que van a haber judicializaciones cuando incendian el lugar donde los policías preparan sus alimentos”.
Así las cosas, el director de la Policía Nacional reitera que “la institución no se amedrenta y ya se encuentra otra vez custodiando y prestando seguridad al casco urbano del municipio El Mango”.

Por su parte el Presidente de la República, Juan Manuel Santos, advirtió que en el país no pueden existir territorios donde no ingrese la Fuerza Pública.

 

“Aquí no hay y no habrá ningún centímetro cuadrado de nuestro territorio vedado para nuestra Fuerza Pública”, manifestó el Jefe de Estado, Juan Manuel Santos durante la Ceremonia de Ascenso de Oficiales de la Policía Nacional.

 

 “La Fuerza Pública lo que está haciendo es protegiendo a estas comunidades de aquellos que les quieren hacer daño”, señaló el Jefe de Estado.

 

Por su parte el Presidente de la República, Juan Manuel Santos, advirtió que en el país no pueden existir territorios donde no ingrese la Fuerza Pública.

“Aquí no hay y no habrá ningún centímetro cuadrado de nuestro territorio vedado para nuestra Fuerza Pública”, manifestó el Jefe de Estado, Juan Manuel Santos durante la Ceremonia de Ascenso de Oficiales de la Policía Nacional.

 

 “La Fuerza Pública lo que está haciendo es protegiendo a estas comunidades de aquellos que les quieren hacer daño”, señaló el Jefe de Estado.