Como inconveniente para los propios usuarios calificó la Asociación Bancaria el proyecto de ley que buscaba hacer ajustes en la Ley 1266 de 2008 sobre Hábeas Data, el cual pretendía establecer un término de permanencia de la información negativa que tienen los bancos de datos del historial de los colombianos que acceden a los servicios financieros y al crédito. La iniciativa se hundió por falta de trámite pero podría ser revivida en el siguiente periodo legislativo.

Esta iniciativa de ley estatutaria es del presidente del Congreso de la República, el senador Luis Fernando Velasco, quien también es el autor de la Ley 1266 de 2008 sobre Hábeas Data, por la cual se dictan las disposiciones generales y se regula el manejo de la información contenida en bases de datos personales, en especial la financiera y crediticia.

Velasco radicó el 26 de agosto de 2015 el proyecto de ley 95/15 Cámara para hacer algunos ajustes que consideró necesarios en la Ley de Hábeas Data,  y luego el mismo como ponente presentó el respectivo informe para primer debate el 28 de septiembre de 2015. Sin embargo de esa época al día de hoy la Comisión Primera de la Cámara no le dio trámite.

En días pasados, el Senador liberal en declaraciones a EL NUEVO SIGLO hizo un balance de los proyectos que aprobó el Congreso en la legislatura que hoy termina, sin embargo, se lamentó por otras iniciativas que no alcanzaron a cumplir los cuatro debate y algunas que no tuvieron siquiera debate.

“Me hubiese gustado tener más tiempo para estudiar el proyecto de la senadora Sofía Gaviria de sostenibilidad alimentaria; me hubiese gustado tener más tiempo para estudiar el proyecto de cirugías plásticas. ¿Sabe cuál me dolió, que ni siquiera lo estudiamos? Me dolió que el lobby de la Asobancaria no dejara que la Comisión Primera de la Cámara votara el proyecto de Hábeas Data”.

El proyecto de Velasco tenía por objeto adicionar la Ley 1266 de 2008, fortaleciendo el derecho a conocer, actualizar y rectificar las informaciones contenidas en bases de datos del sector financiero, crediticio, comercial, de servicios y proveniente de terceros países.

El aspecto central de esta iniciativa de ley es que establece un término de permanenciade la información negativa de los usuarios en los bancos de datos, pues los registros cuyo contenido haga referencia al tiempo de mora, tipo de cobro, estado de la cartera, y en general aquellos referentes a una situación de incumplimiento de obligaciones, se regirán por un término máximo de 2 años contados a partir de la fecha en que sean pagadas las cuotas vencidas o sea extinguida la obligación.

Cuando la obligación esté en mora, el dato negativo y los datos cuyo contenido haga referencia al tiempo de mora, tipo de cobro, estado de la cartera, y en general aquellos referentes a una situación de incumplimiento de obligaciones, caducarán una vez cumplido el término de 5 años de la prescripción de la acción ejecutiva.

En tanto que sobre la información crediticia y financiera de carácter positivo de los usuarios el proyecto de ley establece que  permanecerá de manera indefinida en los bancos de datos de los operadores de información.

Inconveniencia

El vicepresidente de asuntos Corporativos de Asobancaria, Andrés Rojas, le dijo a EL NUEVO SIGLO que “este tipo de leyes (el proyecto) lo que hacen es que se crea una cultura de no pago, entonces la gente simplemente no paga sus deudas y espera una amnistía para condonar su deuda. Se ha demostrado que no es un beneficio para el consumidor. La Ley (Hábeas Data) como está funciona bien, lo que ha permitido que haya una mayor inclusión financiera, y lo que ha permitido que hoy en día tengamos los índices de bancarización es precisamente que hay información completa, que ya cada vez la información es más fácil de obtener, y eso lo que va a permitir es que cada vez se pueda bancarizar e incluir más gente en el sistema formal financiero”.

Añadió Rojas que la inversión es fundamental, “si la buscamos limitar o parcializar, ahí ya empezamos a tener problemas y vamos a empezar a afectar nuestros mismos indicadores y metas de inclusión que tenemos como país”.

El directivo dijo que no es cierto que este proyecto de ley no haya sido debatido por la Comisión Primera de la Cámara de Representantes por el lobby de Asobancaria. “Más que por el lobby nuestro, creo que el proyecto no tuvo mucha acogida en los parlamentarios”.

Añadió que esta iniciativa de ley estaba por debajo de los estándares internacionales en información financiera. “Hay personas que la única garantía que tienen para obtener un crédito es su historial crediticio. Si esa información la reducimos de cuatro años a dos años como lo pretendía el proyecto, pues la gente lo que va a tener es menos opción de crédito. Entonces las principales personas que se opusieron al proyecto, no fue ni siquiera la Asociación Bancaria sino que fueron las microfinancieras, las mismas cooperativas de ahorro y crédito, y los pequeños ahorradores, que son los que no tienen una garantía, un inmueble, algo como para garantizar el pago de un crédito. Lo único que tienen para acceder es un historial de crédito”.

Rojas explicó que “nosotros lo que hicimos fue hablar con algunos parlamentarios y contarles el alcance del proyecto. Sé que los hicieron otras organizaciones también, que lo hicieron las centrales de información”.