El ingenio del colombiano Mateo Blanco no tiene límite, como tampoco el arte que crea con diversos materiales. Sus obras no sólo están exhibidas en varios museos del mundo, sino que en su restaurante STK,  en Disney Springs, Estados Unidos, “levanta” obras que son el plus que atrae a miles de personas.

Esta vez sorprende con el personaje de la historia de “Alicia en el país de las maravillas”, la que hizo con miles de cartas y dados usados en los casinos. Es una escultura de 1.63 metros de altura.

Esta nueva obra fue diseñada exclusivamente para jugar con la arquitectura del restaurante STK, tomando como inspiración las vigas blancas de los techos para crear una escultura cinética. De frente es una figura etérea, como una silueta adornada de cientos de dados y de lado aparece la Reina de Corazones, hecha con más de mil cartas usadas en casinos.

"Quise hacer una versión más sofisticada de este personaje icónico, y teniendo en cuenta que es una obra de la literatura británica, tomé como referencia la estatura de la Reina Isabel II", comenta Mateo.

Este artista colombiano tiene acostumbrados a los norteamericanos a vivir a través de sus obras la exploración de las grandes posibilidades plásticas que tienen los materiales cotidianos y poco convencionales. Así lo evidencian sus retratos de personajes representativos de la cultura popular como el de la actriz y ganadora del Oscar, Jennifer Lawrence, que reposa en el Museo Slugger de Louisville, Kentucky. La creación está hecha con más de 10.000 piezas de maní titulada Jennifer is nuts, siendo una de las obras más visitadas y fotografiadas del verano en 2016.

Anualmente, más de 14 millones de personas visitan las obras del artista colombiano en los Museos Ripley´s Believe or Not! alrededor del mundo. Su ingenio lo ha llevado a trabajar piezas con chocolate, café colombiano, azúcar, plumas, retazos de tela, ojos de juguetes, naipes y dados, por mencionar solo algunos de los materiales que usa Blanco en la creación de sus obras.

Blanco, además, es tenor e hizo parte de varios grupos de ópera, en los que interpretó La Traviata, Rigoletto, Il Trovatore y Don Giovanni, entre otras. Más adelante, siendo ya un joven radicado en Estados Unidos cantó ante el presidente, George H.W. Bush.

Actualmente, dedica gran parte de su vida a ayudar a la promoción y difusión de las artes latinoamericanas en el país del norte, a través de tertulias semanales de Arte y cursos que ha impartido en colegios y universidades. Alterna esta actividad como portavoz del departamento de archivos y exhibiciones para los Museos Ripley´s.