La tarea de Uribe

El anuncio del senador y expresidente Álvaro Uribe, ayer en la mañana, en su cuenta de Twitter, sobre sus “propósitos políticos inmediatos” fue entendido en los pasillos del Congreso y los corrillos políticos. El exmandatario dijo que se dedicará a apoyar al presidente Duque en la búsqueda de la “mejor solución tributaria”, también a buscar la “Unidad del Centro Democrático” así como a impulsar una “coalición interpartidista para concertar y apoyar las reformas del Gobierno”. Un experimentado senador de La U le dijo a un periodista de EL NUEVO SIGLO que “…llamaba la atención que Uribe anunciara que ahora se dedicaría a hacer lo que tiene que hacer todo jefe de partido de gobierno: sacar avante los proyectos impopulares, asegurar la unidad del partido de gobierno frente a la Casa de Nariño y generar los consensos con el resto de partidos para destrabar la agenda legislativa… La noticia no es lo que anunció Uribe, sino que pareciera que no lo venía haciendo”.

Efecto de encuestas (I)

Para otros congresistas el anuncio de Uribe tendría su explicación en el duro golpe político que significó para el presidente Duque y el propio expresidente la realidad que reflejaron las encuestas del pasado lunes, en las cuales la imagen favorable del Jefe de Estado se vino a pique, arrastrando también a su páter político, que también vio cómo su desfavorabilidad aumentó. Para no pocos analistas, la causa principal de esa descolgada, a tan solo completar los primeros 100 días de gobierno, tiene que ver con el efecto negativo en la opinión pública del proyecto de reforma tributaria. Para muchos observadores, las encuestas fueron un campanazo para Uribe y el Centro Democrático, que aunque han tomado distancia del Gobierno en temas como la reforma tributaria, la opinión pública los castiga por igual a él y a su colectividad.

Efecto de encuestas (II)

Y hablando de esas encuestas que se conocieron el viernes pasado, se supo que varios partidos y dirigentes las analizaron a fondo el fin de semana en pro de determinar en qué ciudades la crisis de favorabilidad del Gobierno era más marcada, toda vez que es un “insumo” que hay que empezar a tomar en cuenta de cara al escenario político que se está delineando para el arranque definitivo, el otro año, de las campañas para la elección de gobernadores, alcaldes, diputados, concejales y ediles, en octubre de 2019. Como es apenas obvio, para algunos estrategas políticos es necesario establecer qué tanto la caída de imagen de Duque y Uribe podría impactar las posibilidades electorales del Centro Democrático que apuesta mucho a ganar plazas, algunas de ellas consideradas como “puntos de honor”, como las alcaldías de Bogotá y Medellín, así como la Gobernación de Antioquia.

Efecto de encuestas (III)

Para cerrar con este tema de las encuestas y su impacto en el escenario político de cara a las elecciones del próximo año, en las toldas de la Alianza Verde y la Colombia Humana, aunque públicamente sus voceros indicaron que era claro que existía un castigo de la opinión pública al gobierno y el uribismo, en privado también han admitido que sería muy arriesgado lanzarse a concluir de forma tempranera que la descolgada de Duque y Uribe en los sondeos de inmediato significa un repunte para los ex candidatos Sergio Fajardo y Gustavo Petro. La principal razón para esa cautela tiene que ver con que en esas mismas encuestas se registra que los porcentajes de favorabilidad de ambos dirigentes no tienen repuntes extraordinarios. Vea pues.