¿Con qué ambiente llega el POT al Concejo de Bogotá? | El Nuevo Siglo
Varios concejales denunciaron que este articulado ha cambiado “demasiado” y no es claro qué es lo que va a llegar. 
Cortesía Twitter Luis Ernesto Gómez.
Lunes, 6 de Septiembre de 2021
Redacción Nacional

Habiendo surtido en 18 meses todo el proceso de elaboración, socialización, concertación con la Corporación Autónoma Regional y evaluación por parte del Consejo Territorial de Planeación Distrital (CTPD), este viernes será radicado ante el Concejo de Bogotá el Plan de Ordenamiento Territorial.

A partir de ese momento el Concejo tendrá exactamente tres meses para debatir y analizar este articulado, primero en la Comisión del Plan y luego en la plenaria. Desde ya es claro que la discusión será larga, álgida y desgastante. Aún así, ¿cómo están hoy los ánimos y el ambiente en el Cabildo frente a este proyecto? Más aún: si se votara mañana, ¿cómo sería?

EL NUEVO SIGLO tanteó las aguas con concejales de diferentes partidos quienes, a grandes rasgos, aseguran que este articulado ha cambiado “demasiado” y no se sabe qué es lo que va a llegar. También consideran que esta hoja de ruta para determinar la planeación territorial de la ciudad por los próximos 12 años “está muy cruda”.

A este respecto, la concejal de la coalición de Colombia Humana-UP-MAIS, Susana Muhamad, señala que el POT es un tema supremamente complejo porque tiene muchos artículos, contempla muchos aspectos y le falta mucho cuerpo.

“En este momento yo no te puedo adelantar cuál será el voto de la coalición porque estamos en pleno estudio, pero lo que sí te puedo decir es que entre todos los actores con los que hemos hablado, desde residentes y miembros de la comunidad hasta ambientalistas y el miércoles nos reunimos con ProBogotá y con Camacol, hay un consenso: El POT está crudo y le falta maduración" dijo Muhamad.

Agregó que "está crudo en sustentación técnica y está crudo en el desarrollo de la norma. Deja muchas normas para desarrollar posteriormente, hay pocas claridades de cara a las comunidades frente a qué va a pasar con sus sectores, y es claro que se ha hecho de afán”.

Concluye la cabildante que hay una sensación generalizada de que debería mejor completar la tarea y radicarlo después o ese puede ser un factor de discusión fuerte en la comisión.

Lo mismo consideró el concejal del Centro Democrático, Andrés Forero, quien comenzó por aclarar que la alcaldesa López tiene mayorías, algo que se ha evidenciado constantemente. A su juicio, aún si son mayorías que no la defienden ni se apropian de sus proyectos, terminan votando favorablemente.

En este sentido fue claro en advertir que los contenidos del POT deberán ser revisados con lupa. De hecho hoy se llevará a cabo un debate de control político en la Comisión del Plan sobre ese tema, precisamente por lo variante que ha sido su articulado.

“Los contenidos están cambiando continuamente por la celeridad con que la Alcaldesa decidió darle trámite. Hay decisiones en materia de planeación urbana que pueden ser bien intencionadas pero que plantean problemas: probablemente se termine expulsando la construcción de vivienda fuera de Bogotá y eso puede ser complicado pero como te digo: lo están cambiando mucho y no sabemos a ciencia cierta qué va a llegar. Como ha sido tan improvisado, ha tenido muchas quejas, sugerencias y se está cambiando sobre la marcha. Lo que salió del CDPT no sabemos si es el mismo que llegará al Concejo de Bogotá”, indicó a este Medio el concejal Forero.

Por su parte el conservador Nelson Cubides también se refirió a los constantes cambios que ha padecido este documento. Advirtió, no obstante, que el POT llega en el peor de los momentos de la administración de Claudia López.

“Este es un proyecto diferente a los que tradicionalmente se traen y un concejal no le puede hacer un cambio o modificación salvo por visiones estrictamente técnicas. Los concejales no podrían hacer una modificación como se hace en cualquier otro proyecto y eso le da una ventaja. Nosotros no tenemos nada definido al respecto porque el texto está cambiando muy seguido. Hemos tenido por lo menos cuatro versiones, se han ido agregando detalles pero sí nos preocupan varios temas como la modificación a los colegios de menos de 300 estudiantes o el uso del suelo en Suba Oriental, que deberán revisarse con detalle”, dijo a este medio Cubides.



Falta de participación

Ahora, el concejal Andrés Forero también refirió que “este proyecto entra al Concejo con muchísimas dudas sobre la legitimidad del proceso de participación, y no solo por el CDPT sino por todo el proceso previo”.

A este respecto el concejal de Bogotá para la gente, Juan Baena, quien hizo una serie de denuncias precisamente por la legitimidad en el proceso de participación que tuvo el POT, le dijo a este Medio que es imposible responder en estos momentos cómo votaría, aludiendo a que no ha sido radicado aún en la Corporación y se está estudiando, por lo que: “hay que ver cómo llega”.

Aún así, el cabildante sí refirió que una de las grandes debilidades que tiene el Plan de Ordenamiento Territorial es que la ciudadanía no lo conoce a fondo. “La ciudadanía que se me ha acercado me ha dicho que no ha sido socializado y esa es una debilidad que debe ser resarcida y trabajada por la Administración Distrital. Un POT debe tener participación e incidencia ciudadana”

“Estaremos pendientes de organizar los debates que se necesiten y llevar la discusión que sea necesaria para su adopción, pues la ciudad lleva mucho tiempo sin adoptar uno. Queremos un POT pero no cualquier Plan”, sentenció Baena, quien añadió que este no debe ser un tema ni de egos ni de disputas políticas, sino un documento técnico.

Preguntas sin resolver

Por otra parte, el concejal Jorge Colmenares, único del Centro Democrático en la Comisión del Plan, afirmó que este es un documento que plantea muchas dudas pero también fue claro al advertir que se necesita.

“Bogotá merece y necesita un Plan de Ordenamiento Territorial acorde a las necesidades que como ciudad necesita. Tengo varias preguntas que hacerle a la administración y que espero que sobre la marcha del debate me las respondan. Es muy pronto decidir mi voto hasta que no tenga claridad frente a las preguntas que le haré a la administración. Pero, eso sí, Bogotá necesita este POT y espero que logre salir adelante”.



Eventuales problemas jurídicos

Otras grandes inquietudes con relación a este POT las puso sobre la mesa el concejal Emel Rojas, quien desde ya aclaró que “Colombia Justa y Libres apoyaría el proyecto”. 

No obstante, llamó la atención sobre un hecho clave: “Yo siento que va a haber un camino tortuoso por la vía de los tiempos, de acciones extra-Concejo y extra-administrativas como por ejemplo las tutelas, recusaciones y ese tipo de manejos que pueden entorpecer la aprobación del proyecto”. Añadió que también podría haber peros, en el marco del debate que se desarrolle en el Concejo, por ejemplo con relación a los constructores.

“El proyecto va a pasar. Tiene ventajas pero también tiene algunas dificultades, por ejemplo para los constructores y para lo que, en mi criterio, será la redensificación de la ciudad. Se piden muchos aislamientos. El índice de la ocupación de los predios es muy bajo y no va a ser tan rentable construir los predios que hay al interior de los barrios sin desarrollarse. Ahí habrá dificultades y las cargas no son tan claras. Pero tiene cosas buenas. Por ejemplo se autorizan los usos mixtos, pero también tienen la dificultad de qué usos podrán ser complementarios”, finalizó Rojas.

Apoyo a ponencia negativa

Por último, el concejal del Polo, Carlos Carrillo, considera que el Plan de Ordenamiento Territorial obviamente se va a aprobar pues al no ser digerible pero sí extremadamente extenso es probable que no sea estudiado por muchos a profundidad.

“¿Hasta qué punto va a estudiar el Concejo esto a profundidad? No todos los concejales tienen ni el equipo ni la vocación ni la intención de darle un debate riguroso y serio. Algunos lo darán pero otros ya dan esto por aprobado. A Claudia López le han aprobado todo: hasta el billón para Transmilenio con todo el revuelo que generó en la opinión pública. Aquí va a pasar lo mismo. Esto va a pasar vía fast track y los temas importantes perderán tema de discusión en una tonelada de artículos entre lo divino y lo humano”, dijo.

Finalizó diciendo que  “votaría el sentido de la ponencia negativa si votara en la comisión. De haber ponencia negativa, la acompañaría. Pero también hay que ver que más le meten. Durante estos días ese texto va a tener modificaciones”.