La zona de libre tránsito dentro de la Unión Europea está en peligro a causa de la crisis migratoria, declaró la directora gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI), Christine Lagarde en Davos, hablando a título personal.
"La crisis de los refugiados es decisiva, desde mi perspectiva personal", explicó Lagarde en un debate sobre perspectivas económicas internacionales.
Al ser preguntada sobre si eso ponía en peligro la propia zona Schengen, de libre circulación de personas, respondió: "Sí, lo creo".
La entrada en Europa de más de un millón de inmigrantes el año pasado, un flujo que no tiene visos de cesar a corto plazo, ha sido uno de los temas dominantes del Foro Económico Mundial.
Lagarde recordó en su intervención que el FMI no ha expresado una perspectiva negativa sobre ese gigantesco fenómeno migratorio, y que al contrario, con una correcta integración, el impacto en el producto interior bruto de la Eurozona podría ser positivo.
Pero los responsables políticos europeos se muestran muy alarmados por la perspectiva.
El primer ministro francés Manuel Valls alertó en Davos del peligro de una "dislocación" de la Unión Europea, puesto que numerosos países de la zona Schengen, uno de los pilares de la UE, están aplicando barreras y rechazando inmigrantes en sus fronteras.