Mañana, llega procedente de Estambul, para presentarse ante el fiscal noveno, quien le dictará medida de aseguramiento.

Para defenderse personalmente pero por esa vía seguir en la lucha que inició hace dos años para que no le “roben” al Estado una millonaria suma de dinero por una carretera que “nunca se hizo”  y por la cual ya se pagó el monto acordado en una conciliación, regresa mañana al país el ex ministro de Transporte, Gustavo Adolfo Canal.

En extenso diálogo con W Radio, el ex ministro Canal explicó el  increíble litigio que se suscitó con Conigravas y los hermanos Botero Aguilar por una proyectada carretera en el departamento de Antioquia que nunca se realizó, proyecto presentado en 1993 y que hoy,  18 años después, lo tiene con medida de aseguramiento por el presunto delito de peculado a favor de terceros.

Según Canal, la mencionada carretera tenía un costo de $690 millones y terminó costando $2000 millones cuando se presentó el litigio. Dijo que en 1998 se llegó a una conciliación y también increíblemente se determinó que se debía pagar una suma de $4 mil millones.
Recordó que Federman Quiroga, quien ya está asegurado por el proceso judicial que se abrió por el no pago de una parte del dinero pactado en la conciliación, trabajó con él en Invías y posteriormente fue su viceministro.

Canal explicó que en  1998 se llegó a la conciliación y se pactó la cifra a pagar. “Llegamos en la práctica a lo que el juicio de todo un equipo profesional, jurídico, que se le estaba debiendo a otra cifra diferente que era como $4000 millones. Esto se fue a todos los tribunales, posteriormente al Instituto anticorrupción de la U. del Rosario donde dijeron y se determinó que había que pagar $206 mil millones y unas costas de abogados de $53 mil millones”.

El ex ministro calificó que todo ello fue “un negocio de los abogados, de los ingenieros que se vuelven abogados, del robo permanente que le hacen al país a base de argucia jurídica. Esto es una vergüenza".

Posteriormente -dijo- cuando fui ministro aceptamos pagar al interés puro, o sea llevando a valor presente, nos dieron plazo de pago de 6 meses. En ese periodo conseguimos el dinero en el Ministerio de Hacienda y pagamos un año antes de que se venciera el plazo. 

"Salí del ministerio en el 2002 y en el 2006 nos enteramos con Quiroga que iban a pagar esa millonaria suma, que habían hecho un nuevo acuerdo y que los acreedores se conformaban con el 50% , es decir $70 mil millones más las costas de los abogados”.
 

Fue en ese momento cuando Canal decidió con Quiroga avisar a su sucesor, el entonces ministro Andrés Uriel Gallego, al zar anticorrupción y al Ministerio de Hacienda de lo que estaba sucediendo. “Y comenzamos un calvario para que no pagaran. Se nos amenazó,  en el 2009,  de que nos iban a meter en la cárcel, y finalmente lo lograron. Este domingo estaré en la cárcel o con la casa con cárcel”.

Canal fue enfático en señalar que con su regreso al país viene a poner la cara más que para defenderse él, para defender “la cosa pública a la que tristemente le mete la mano mucha gente en Colombia y no pasa nada”.
 

Insistió en que  hay que cuidar la plata del Estado y que tras un litigio, las costas de abogado cada uno las paga “pero aquí nos la clavaron, son $53 mil millones, eso es todo un platal. Cuantas carreteras y  cuántos niños se pueden alimentar con esa plata”.
 

Denunció que ellos pagaron más de $3 mil millones de lo pactado en la conciliación, pero que los demandantes además hicieron una “jugada monumental:  congelaron unas cuentas del Invias y hubo que pagarles una plata adicional”.

Finalmente indicó que el entonces presidente Andrés Pastrana no conoció sobre esta situación porque la conciliación se acordó en 1998 y se pagó y esta nueva situación se generó en el 2006.